Cómo es de conocimiento público este 19 de junio se realizará en todo el país la segunda vuelta de las elecciones presidenciales para escoger quien ocupará en los próximos 4 años el solio de Bolívar. En la primera vuelta de estas elecciones realizada el pasado 29 de mayo, estaban habilitados más de 39 millones de colombianos para ejercer su derecho al sufragio, sin embargo tan solo 21 millones de compatriotas votaron, los 18 millones restantes no ejercieron su derecho y por ende, desperdiciaron la oportunidad de hacer sentir su voz en las urnas.
En Nariño cerca de 600 mil electores se acercaron a las urnas, nuestro departamento tiene un potencial electoral que ronda el millón cien mil votantes, demostrando que el porcentaje nacional de abstencionismo es similar tanto a nivel regional como nacional. Este es un dato sumamente relevante cuando lo leemos en clave a la visión que la mayoría de ciudadanos tiene en las calles: » Colombia está mal social, económica y políticamente».
Esta disertación no tiene sentido si no ejercemos todos el derecho al voto, no podemos pedir un cambio si no aportamos para hacerlo, no podemos pretender que la situación social que vive el país se transforme si el día de elecciones preferimos salir de paseo, a las fincas o hacer turismo en lugar de participar en la fiesta democrática, es inaudito dejar en manos de los otros la posibilidad de transformación, esta es una tarea de todos, en donde cada ciudadano debe poner su granito de arena.
En la antigua Grecia solo unos pocos tenían el privilegio de votar, hoy más de 39 millones de colombianos pueden hacerlo, miles de mujeres murieron en todo el planeta para conseguir que el sufragio sea universal, hoy en nuestro país cerca del 50% de mujeres que pueden ejercer el voto no lo hacen. Una gran cantidad de jóvenes han muerto o sufrido heridas durante las manifestaciones que se han suscitado a lo largo de la historia de nuestra nación pidiendo mayores oportunidades en pro de una mejor sociedad, sin embargo un porcentaje alto de los jóvenes que pueden contribuir en el futuro de su país, prefieren quedarse en sus casas mirando al nuevo instagramer o youtuber hablar por hablar durante horas sobre temas tan trascendentales como el color de la chaqueta que debe usar el día de hoy, o la marca de los zapatos que son más populares en el mundo; los jóvenes pierden su oportunidad de dejar huella en la historia de su nación imbuidos en un mundo de fantasías e ilusiones que no es pasado, ni presente, ni futuro, es un simple espejismo.
Desde estas líneas hago un llamado vehemente a todos los colombianos a acercarse a las urnas este domingo, a votar a conciencia sin ningúna presión ni movidos por una dadiva particular, pensemos en la Colombia en la que hemos vivido durante nuestra vida, y en la que queremos que nuestros hijos, sobrinos y nietos vivan, el futuro es ahora.
Por: Mauricio Fernando Muñoz Mazuera

