El pasado fin de semana comenzó el Torneo de la Primera C en Colombia, certamen que cuenta con una histórica participación del departamento de Nariño.
Un total de diez clubes intervienen por la región sur del país en esta competencia. Por Tumaco están Unión Pacífico Sur y Deportivo Tumaco; por Túquerres aparecen Deportivo La Sabana y Halcones Fútbol Club; por Pasto se inscribieron Atlético Nariño, Boca Juniors, Falcón FC, Estudiantes FC, Élite FC y Will Nariño FC.
Cerca de 300 escuadras en el país compiten en el campeonato que sigue siendo un negocio redondo para la División Aficionada del Fútbol Colombiano (Difútbol) y para su presidente Álvaro González Alzate que está en ese cargo desde hace más de 30 años, uno de los hechos absurdos de los tantos que se presentan en Colombia.
Sin embargo, según lo que se expresó en la reciente asamblea de la Federación Colombiana de Fútbol y la Dimayor, este Torneo de la Primera C entregará un tremendo premio al campeón esta temporada, se trata de la invitación a intervenir en la Primera B el próximo año, algo que absolutamente todos estábamos esperando.
«El Torneo de la Primera C arrancó con récord de participantes en Nariño y con muchos jóvenes que se ilusionan con triunfar. El campeón del certamen será invitado al profesionalismo».
Ahora si se sale a pelear por algo, obviamente esperando que esa promesa se haga realidad y que el vencedor efectivamente aparezca en el profesionalismo.
Independientemente que la Difútbol siga engordando sus cuentas con los 5 millones y medio de inscripción que llevaron a cabo las diversas escuadras participantes, lo positivo de todo es que los aproximadamente 10 mil futbolistas que compiten en el certamen, tienen un espacio más para mostrar sus condiciones y soñar con llegar a la élite del balompié nacional.
Durante muchos años la Primera C desapareció y así mismo miles de futbolistas se perdieron, lo cual es muy triste, pero desde el año pasado los jóvenes tienen un espacio para competir.
Lo que sí esperamos especialmente de los equipos nariñenses, es que primero que todo apuesten por futbolistas jóvenes, con lo cual podrían dar un golpe certero para sus instituciones si más adelante llevan a cabo una transferencia importante.
El contar con jugadores mayores de 23 años o de 25, sería un aspecto absurdo, ya que se cierra las puertas a deportistas que tengan entre 15 y 20 años o máximo 22 años que tienen toda una vida futbolística por delante.
Les deseamos lo mejor a todos los equipos participantes, especialmente a los nariñenses.
Por: Hernán Insuasti Gonzales (Acord)

