Tras la guerra entre Rusia y Ucrania se han suspendido algunas importaciones provenientes de estos países. En el caso de Tumaco y la costa pacífica nariñense existe preocupación a pesar de que en días anteriores llegó el último cargamento de fertilizantes, especialmente los ricos en fósforo que son traídos desde Rusia; ya que, si el enfrentamiento continúa podrían quedar sin suministros.
El director del Centro de Investigaciones El Mira de Agrosavia, Carlos Castillo, comentó que la primera medida que surgió tras los problemas sociales de Colombia fue la subida de los precios de estos productos, costo que también incrementó con el inicio del enfrentamiento entre los dos países, situación que ha generado preocupación en los agricultores de la costa, especialmente en quienes cultivan la palma de aceite.
Los elementos que son importados desde Rusia son los fertilizantes ricos en fósforo y potasio. El primer elemento es de vital importancia para los suelos de Tumaco ya que carecen de este.
En promedio, entre 4 y 6 kilos de fertilizante es utilizado por cada árbol durante el año.
“En estos momentos, que no solo tenemos el problema de la salida del Covid sino la guerra, nosotros tenemos que trabajar de manera articulada para solventar esta situación”, expresó.
Según Castillo, para continuar con la recuperación económica se necesita seguir produciendo, y para ello solo hay dos alternativas: la primera, comprar a altos precios los insumos necesarios, evitar los excesos y aplicarlos muy bien; y la segunda es que los agricultores de esta zona del país deben empezar a fabricar sus propios fertilizantes con los productos que son reutilizables.
“Hay dos recomendaciones especialmente a las asociaciones, esto no puede ser individual, necesitamos que estas con sus asociados empiecen un programa muy juicioso de ver cómo están sus suelos y qué componentes les necesitamos suministrar a los suelos. Se debe hacer composta con las cacotas, las hojas y con ello hacer fertilizantes orgánicos, ser muy juiciosos con esos productos que salen de la finca, pero no los utilizamos”.