EDITORIAL

FALTA DE BOMBEROS, UN CANDENTE PROBLEMA

Muy preocupantes nos parecen las recientes declaraciones que entregó a DIARIO DEL SUR, el director del Comité de Gestión de Riesgo de Desastres, Jader Gaviria, en torno a que solo 10 municipios de los 64 de Nariño, tienen convenio con los bomberos.

Lamentablemente nos estamos refiriendo a una situación muy peligrosa e irregular, que no es de ahora, sino que data de mucho tiempo atrás y que nos indica que gran parte del territorio nariñense se encuentra amenazado por la ocurrencia de incendios e inundaciones, sin que se disponga de unidades para controlar esta clase de emergencias, que como todos lo sabemos, se suelen presentar en los momentos menos pensados.

Como ya lo hemos dicho en algunas ocasiones anteriores, la carencia de bomberos en gran parte del departamento de Nariño se debe a la desidia de los alcaldes, quienes en una actitud que nos parece inexplicable puesto que se supone que es una obligación primaria de los mandatarios municipales, velar por la protección de sus comunidades.

Pero en nuestro medio la mayoría de los alcaldes se muestran reacios a suscribir los convenios con los cuerpos voluntarios de bomberos de sus respectivos municipios, en lo que nosotros no vacilamos en calificar como un tratamiento de tercera categoría a un tema tan transcendental e importante para la seguridad de miles de personas.

 

«Muy preocupantes nos parecen las recientes declaraciones que entregó a DIARIO DEL SUR, el director del Comité de Gestión de Riesgo de Desastres, Jader Gaviria, en torno a que solo 10 municipios de los 64 de Nariño tienen convenio con los bomberos».

 

Es más, de acuerdo con la Ley es obligación de los señores alcaldes suscribir esos convenios para abrirles las puertas al funcionamiento de estos organismos de socorro en los diferentes puntos de la geografía nariñense, pero ya estamos viendo que ellos de manera olímpica se pasan ese requisito por la faja, como se expresa de manera popular, por lo que no cometemos ninguna exageración al decir que Nariño se encuentra en permanente riesgo de que se produzca una conflagración, que Dios no lo quiera, podría tener consecuencias funestas.

Todos nosotros crecimos con un viejo adagio de nuestros abuelos, el cual expresa que es mejor prevenir que curar, pero lo malo es que ante la carencia de algo tan elemental y a todas luces necesario como un cuerpo de bomberos, esa prevención no se ve por ninguna parte, lo que explicaría gran parte de los episodios de riesgo que tienen como escenario nuestro departamento de Nariño.

Lo cierto e inquietante es que a estas alturas de la vida, solo 10 de los 64 alcaldes de Nariño, se han acogido a la Ley 1575 de 2002, la Leu General de los Bomberos de Colombia, que ordena que es una obligación no solo de los Alcaldes, sino también de los concejos municipales, proceder a suministrar mediante el desarrollo de los convenios, los recursos que se requieren para el funcionamiento y el mantenimiento de los cuerpos de bomberos.

Esperamos entonces, que los alcaldes quienes muestran esta desidia y despreocupación, que en un momento dado podría ser calificada como criminal, recapaciten y entiendan de una vez por todas, que es necesario que los bomberos estén en todas las poblaciones de Nariño.

Pero esto no sucede así y no queremos bajo ningún punto de vista, que los señores mandatarios y mandatarias municipales solo accedan a darle cumplimiento a la ley, cuando se produzca una tragedia en sus territorios.

En este orden de ideas, también nos parece que comunidad, debe presionar a sus alcaldes, para que procedan a la mayor brevedad posible a destinar los recursos que se requieren para contar con sus instituciones bomberiles como debe ser y lo manda la Ley, para garantizar la seguridad de miles de personas en nuestro departamento de Nariño.