EDITORIAL

REACTIVACIÓN DE LA MANO CON LA SEGURIDAD

Después de los difíciles momentos que hemos vivido en Pasto y en Nariño, a consecuencia de la pandemia de Covid-19, atravesamos ahora por una saludable etapa de reactivación económica, que muy buena falta nos hace a todos nosotros.

En efecto, a pesar que la pandemia de la variante Ómicron hace de las suyas en estos momentos en nuestro país, con un elevado número de contagios y de fallecimientos que no se veían desde hace medio año, lo cierto es que seguimos de lleno en lo que tiene que ver con la normalización de la mayoría de las actividades, entre el comercio, que es fundamental, como todos lo sabemos, para la generación de empleo y el fortalecimiento de nuestra economía.

Es a este último aspecto al que queremos referirnos hoy, atendiendo el clamor de un importante número de comerciantes de la ciudad de Pasto, en especial quienes son propietarios o manejan establecimientos nocturnos de comida y bebida, quienes manifiestan que debido a un alarmante incremento en los episodios de inseguridad, ven cómo en estos primeros días del año es evidente una notable disminución de la clientela, lo que -manifiestan- les está haciendo pasar una situación de necesidades muy similares a la que afrontaron durante la pandemia.

 

«Consideramos que nuestra reactivación en Pasto debe ir estrechamente ligada a la seguridad, para que el proceso sea exitoso y en ese sentido debemos señalar que nosotros mismos hemos observado en estas noches una preocupante soledad en las calles, síntoma de la situación que denuncian los comerciantes».

 

De acuerdo con lo que manifiestan, esto se debe al aumento de los episodios de inseguridad, los que están haciendo que, en horas de la noche, aun los fines de semana, la gente prefiera permanecer en sus casas, ante el temor que les suscita convertirse en víctimas de los delincuentes.

Al respecto, las quejas provienen de diferentes sectores de la ciudad, como la Avenida Boyacá, donde como de todos es sabido funcionan en horas de la noche numerosos establecimientos de comida y bebida, en una vasta extensión que va hasta el tradicional parque de Santiago, el sector del Parque Infantil, Las Cuadras y otras zonas de la capital nariñense, que sufren en la apertura del 2022 una oleada de inseguridad, la cual se refleja de manera negativa en sus negocios.

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De allí el llamado que hoy hacemos a nuestras autoridades para que en estos días y noches difíciles se incremente la presencia de la Policía en las calles de Pasto, especialmente en los sectores considerados álgidos, al ser identificados como frecuente escenario de hechos delictivos.

En este orden de ideas consideramos que nuestra reactivación en Pasto debe ir estrechamente ligada a la seguridad, para que el proceso sea exitoso y en ese sentido debemos señalar que nosotros mismos hemos observado en estas noches una preocupante soledad en las calles, síntoma de la situación que denuncian los comerciantes.

Esa es la razón por la cual son muchos los establecimientos que se ven obligados a cerrar temprano sus puertas, no solo por la falta de clientes, sino también ante el llamado de sus trabajadores, en el sentido de que los dejen ir temprano a sus viviendas, ante el temor de ser atracados.

Es importante, entonces, que nuestra Policía Metropolitana atienda este sentido clamor de la ciudadanía y de esta manera se intensifiquen los operativos de seguridad, con el objetivo de hacerle frente a esta inquietante oleada delincuencial que se ha disparado en estos primeros días del año.

Como se anotaba al principio, es necesario que se aproveche al máximo la etapa de reactivación que estamos viviendo y para que esto sea posible se le debe garantizar a la ciudadanía una total seguridad para que la gente vuelva a salir a las calles de Pasto y se acabe el aspecto de desolación que por estos días estamos viendo en nuestra ciudad