Siguen aumentando los casos de contagio y de muertes en Colombia, a consecuencia del cuarto pico de la pandemia de Covid-19, que esta vez se sufre en Pasto, Nariño, Colombia y el mundo, con la variante Ómicron, que sigue haciendo de las suyas.
Se trata de una situación de la que nuestro departamento de Nariño, no está exento, puesto que, si bien es cierto que hasta el momento no se han presentado víctimas fatales, en cambio la ocupación de las camas UCI ya superó el 60 por ciento, lo que es un indicador de que se deben adoptar a la mayor brevedad posible todas las medidas de bioseguridad posibles para hacerle frente a esta nueva ofensiva del virus que nos ha mortificado la vida durante ya casi dos años.
Lo que en verdad nos preocupa es que estamos hablando de un aumento en el caso de contagios y de personas fallecidas, que viene en aumento cada día, puesto que ya en las últimas horas, el número de muertos en Colombia pasó de 130, lo que indica que en ese sentido se están superando las cifras que se vivieron hace algún tiempo y que, como todos lo sabemos nos llevaron a una gravísima emergencia sin precedentes en el país.
Es lógico pensar que ese incremento se deba las fiestas de Navidad y fin de año, y en nuestro caso de Nariño y de Pasto, debido al Carnaval de Negros y Blancos, que a pesar de que se celebró en medio de normas de seguridad, si contribuyó a que, en más de una oportunidad, se registrarán aglomeraciones.
«El ir a vacunarse se constituye en la mejor arma para evitarnos males mayores, puesto que también los científicos aseveran que en el caso de las personas inmunizadas, la variante Ómicron, es sumamente leve, pero en cambio puede llevar a trastornos bastante delicados a quienes no cuentan con la protección de la vacuna».
Concretamente en lo que tiene que ver con Pasto, nos encontramos con que en la ciudad se vive una epidemia de gripa, pero todos sabemos que en un momento dado ello puede ser el Covid-19 en su variante Ómicron, que de acuerdo con lo que manifiestan los científicos es mucho menos letal que las cepas anteriores, pero en cambio, tiene un alto poder de contagio.
Entonces, nuestro llamado es para que nos vacunemos. Quienes por alguna razón no lo han hecho deben acercarse de inmediato a los puestos de vacunación y lo mismo deben hacer, a quienes les falta completar su esquema, que naturalmente incluye la tercera dosis.
El ir a vacunarse se constituye en la mejor arma para evitarnos males mayores, puesto que también los científicos aseveran que en el caso de las personas inmunizadas, la variante Ómicron, es sumamente leve, pero en cambio puede llevar a trastornos bastante delicados a quienes no cuentan con la protección de la vacuna.
No podemos olvidar que en estos instantes nos hallamos en plena reactivación económica, luego de la grave crisis económica a la que nos vimos abocados desde marzo del 2020 y por lo tanto, no podemos permitir que en cualquier momento este cuarto pico, se le salga de las manos a las autoridades nacionales y de lugar a nuevas medidas de confinamiento, como las que sufrimos a comienzos de la pandemia.
Se trata de una posibilidad que debemos analizar con mucha responsabilidad, puesto que como muchas veces lo hemos dicho, de nosotros mismos depende el seguir adelante en el camino a la normalidad que hemos emprendido este año.
Es así como debemos de mantener las medidas de bioseguridad que nos han acompañado desde hace dos años, como lo son el uso obligatorio del tapabocas, el lavado frecuente de manos y el evitar las grandes aglomeraciones, que siempre son el caldo de cultivo para los contagios.
En ese sentido, debemos entender que en estos momentos estamos viviendo etapas diferentes de la enfermedad, las cuales son desconocidas hasta para los mismos científicos, puesto que el virus presenta un comportamiento diferente. Por lo tanto, son importantes los lineamientos que se están haciendo en Pasto en esta materia, para salir adelante en este nuevo reto.

