Han transcurrido muy pocos días del 2022 y diversos temas se comenzaron a debatir en el país, los cuales sin lugar a dudas son de extrema importancia.
Uno de ellos es la posibilidad de volver a la presencialidad en las instituciones educativas. Otro es la expectativa que se tiene desde ya con motivo de las elecciones que se cumplirán este año.
Respecto al primer punto, considero que ya es hora de volver a las aulas por parte de los estudiantes. Entendemos los temores que aún existen por el Covid-19 y por la variante conocida en el último tiempo, sin embargo, el regresar a una relativa normalidad ya es una necesidad para los estudiantes, quienes en los últimos años han perdido una tremenda oportunidad de relacionarse con los demás, por eso, aquellos muy pequeños están creciendo aislados de la sociedad y de la realidad, con un futuro muy incierto en cuanto a su comportamiento sicológico.
Obviamente, el Gobierno Nacional debe garantizar las condiciones mínimas para que se pueda volver y los niños asuman una responsabilidad con la ayuda de sus profesores y padres de familia.
Nos hemos dado cuenta que las diversas actividades cotidianas ya se cumplen sin contratiempos, entonces por qué truncar un desarrollo normal en la parte afectiva de la niñez.
“El volver a las clases presenciales por parte de los estudiantes de colegio, así como las campañas políticas, han convertido muy candente este año que acaba de comenzar. Esperemos que los colombianos tengan memoria a la hora de elegir y no volvamos a cometer los mismos errores de siempre”.
Respecto al otro tema de actualidad, que es el político, ya se comienza a vivir con intensidad esa situación. El estreno de las sedes, la bendición de las mismas, las papayeras y muchas cosas más, se han convertido en el pan de cada día con miras a las votaciones de marzo.
Aquellos senadores y representantes a la Cámara que en los últimos cuatro años poco se los miró, ahora ya aterrizan en el departamento de Nariño buscando votos para mantener sus curules, otros para mejorar sus cargos y unos más para buscar llegar por primera vez.
Hasta el momento la historia pinta similar a lo que históricamente se ve en cada elección y si nada extraordinario ocurre por lo general se terminará eligiendo a las mismas personas de siempre o las que sigan las corrientes de los que se hicieron a un lado.
Ya en mayo se elegirá al nuevo presidente de Colombia, para lo cual los que están en el poder moverán cielo y tierra para seguir allí a las buenas o a las malas.
Ese sueño o ese bla bla bla del año anterior con motivo del prolongadísimo paro nacional y las continuas protestas, ojalá se vean reflejados en las urnas. Es decir que ya es hora de actuar y acudamos a las votaciones con mucha claridad respecto a quienes vamos a elegir. Renunciemos a la empanada, al café o a tantas cosas insignificantes y elijamos a quien consideremos tengan la suficiente capacidad para representarnos los próximos cuatro años.
El llamado también es para las personas que lanzaron sus nombres para ser elegidos. Creo que la mejor manera de convencer al pueblo para que les entreguen su voto, es hablando con claridad y prometiendo cosas alcanzables. De una vez por todas se debe dejar a un lado el querer llegar a como dé lugar, ya que eso significa mentirle a la gente o sacar recursos de donde no se tenga para comprar conciencias y luego buscar a como dé lugar la forma para recuperar esos dineros.
Por: Claudia Andrea Zambrano