Nuevamente empiezan a circular por redes sociales, televisión, prensa y radio las campañas para prevenir los lesionados con pólvora en Nariño, departamento que lastimosamente pese al esfuerzo de las autoridades siempre termina convirtiéndose en uno de los más afectados del país.
Para nadie es un secreto que el departamento tradicionalmente disfruta las fiestas de fin y comienzo de año con elementos pirotécnicos y a decir verdad eso no está mal. El problema es que por la irresponsabilidad de unos cuantos que se creen más poderosos por explotar de todo terminan quemados y peor aún lesionando a otros, sin contar en los casos de menores de edad que han quedado mutilados o en un pésimo estado de salud por culpa de la falta de compromiso de los adultos a cargo.
Pese a las amenazas de las autoridades de castigos ejemplares para los adultos que permitan que los menores de edad jueguen con pólvora todos los años las cifras aumentan y si bien somos una región rica en cultura y desde enero nos destacamos por la fiesta y el talento de los artesanos, en la época navideña nuestro dolor de cabeza siempre es la pésima imagen que dejamos ante Colombia por los casos de lesionados.
Ahora cuando gracias a la vacunación contra el Covid-19 y el autocuidado se van a poder retomar algunas actividades y principalmente vivir las fiestas en familia y con seres queridos es necesario y con urgencia que exista el compromiso de la sociedad, pero ese compromiso real que nos obliga a todos a tener sentido común para saber que las celebraciones del hogar pueden vivirse sin necesidad de quemarnos y correr ese tipo de riesgos.
Ojalá que este año si sea la oportunidad para disfrutar en familia, para recuperar los abrazos que hace un año no se dieron por la pandemia y lo más importante que todo lo que nos ha pasado y está cambiando en el mundo nos ayude a tener más conciencia de la verdadera forma de disfrutar la vida y principalmente a la familia.
Vamos a ponernos la mano en el corazón y desde ya impulsar esa campaña en la cual le decimos No al uso de pólvora, no a las celebraciones irresponsables y principalmente no a correr el riesgo de vivir las fechas más especiales del año en un hospital o algo peor simplemente porque unos pocos decidieron arriesgar su vida y la de sus seres queridos por una diversión de momento. Tenemos que unirnos para que por primera vez Nariño se destaque por todo lo bueno que tiene y no por la falta de razón e irresponsabilidad a la hora de celebrar.
Por: Claudia Zambrano Erazo