Colombia registró un desempeño favorable en ciertos indicadores económicos, especialmente en sectores relacionados con las exportaciones y el comercio exterior. Productos agroindustriales y bienes con valor agregado mostraron un aumento en su presencia en mercados internacionales, lo que contribuyó a fortalecer el ingreso de divisas y la actividad productiva en varias regiones del país.
Este comportamiento fue acompañado por esfuerzos institucionales para apoyar a pequeños y medianos productores, promover la diversificación de la oferta exportable y facilitar el acceso a nuevos mercados. A nivel interno, las autoridades económicas destacaron la importancia de mantener la estabilidad macroeconómica y estimular la inversión, en un contexto de desafíos globales que siguen afectando el crecimiento económico y la inflación.

