Luego de semanas marcadas por tensiones internas, debates organizativos y desacuerdos políticos, las comunidades indígenas de Nariño comienzan a ver un escenario más claro frente a las próximas contiendas electorales.
Según los análisis del dirigente nariñense, con amplio reconocimiento, no solo en los sectores indígenas, sino en el panorama nacional, Polivio Rosales, se avecina un triunfo avasallador.
“Estamos seguros que nuestro movimiento de Autoridades Indígenas de Colombia, Aico, contará con presencia, tanto en la Cámara de Representantes, como en el Senado, con sus congresistas, que velarán y serán las voces, que después del 8 de marzo, estarán defendiendo los intereses y buscando proyectos que beneficien no solo a los indígenas, sino también a los afro, víctimas del conflicto, campesinos, y comunidad en general con gestión transparencia, vocación y voluntad de servicio, especialmente a las clases populares.”, expresó el dirigente.
Agregó que “la invitación es para que el 8 de marzo, los nariñenses y colombianos, salgan a votar temprano y en forma masiva, para elegir verdaderos representantes de los pueblos y acabar con los políticos tradicionales que no piensan en las comunidades, sino en sus propios intereses.
El proceso de definición de candidaturas no estuvo exento de dificultades, especialmente en lo relacionado con la unidad del movimiento indígena y la legitimidad de algunas postulaciones. Sin embargo, hoy se consolidan dos apuestas políticas que buscan fortalecer la representación indígena en el Congreso de la República.
Por un lado, se encuentra la Cámara de Representantes, donde se logró concretar una coalición entre el Partido Alianza Verde y el Movimiento de Autoridades Indígenas de Colombia (AICO). Esta alianza se configura como una apuesta estratégica de los pueblos indígenas para contar con una representación sólida por el departamento de Nariño, articulando agendas ambientales, territoriales y de derechos colectivos, en un escenario político cada vez más competitivo.
La consolidación de esta coalición responde a la necesidad de sumar fuerzas y evitar la dispersión del voto indígena y alternativo, una de las principales preocupaciones manifestadas por las autoridades tradicionales y las bases comunitarias durante el proceso de concertación. La Cámara se perfila, así como un espacio clave para la defensa de los intereses de los pueblos indígenas y campesinos del departamento.
Definida lista al Senado
De manera paralela, también quedó definida la lista al Senado de la República por la Circunscripción Especial Indígena, encabezada por uno de los líderes más representativos del Movimiento AICO: Jesús Cuasapud. Su nombre emerge como una figura de amplio reconocimiento dentro de los pueblos Pastos y Quillasingas, respaldado por una trayectoria política y comunitaria construida desde el territorio.
Un reconocido líder
En declaraciones a DIARIO DEL SUR, Jesús Cuasapud expresó ha representado de manera constante los procesos políticos y organizativos de las comunidades indígenas, destacándose por su paso como Gobernador del Resguardo Indígena de Mueses Potosí, donde lideró procesos de fortalecimiento organizativo, defensa del territorio y articulación institucional. A ello se suma su experiencia como Coordinador de la Mesa Regional Permanente de Concertación de los Pueblos Pastos y Quillasingas, un espacio clave de interlocución con el Estado.
Cuasapud, también invitó a los indígenas y al pueblo nariñense y colombiano, “a votar por nuestras aspiraciones de nuestro movimiento, al Senado y Cámara”
Dialogo y concertación
Este recorrido ha marcado un trabajo sostenido con las comunidades, basado en el diálogo, la concertación y la defensa de los derechos colectivos. Desde distintos sectores indígenas se resalta que su liderazgo no es coyuntural, sino el resultado de años de trabajo político y comunitario, lo que hoy lo posiciona como una de las principales cartas del movimiento indígena a nivel nacional.
De cara a las elecciones, el reto principal será mantener la unidad, garantizar la participación informada de las comunidades y lograr que estas candidaturas representen verdaderamente las luchas históricas de los pueblos indígenas de Nariño y del país.
Al respecto, los líderes indígenas, señalaron que terminadas las diferencias y desacuerdos, , ahora el objetivo es el de llegar unidos a las elecciones legislativas del 8 de marzo del próximo año, Senado y Cámara de Representantes, para lograr los objetivos de llegar al Congreso de la República.
“En estas elecciones, los indígenas debemos tener una gran participación no solo en el departamento de Nariño, sino en todo el país. Por ello, reiteramos nuestro llamado para que ese 8 de marzo, acudamos de manera masiva a las urnas y hagamos sentir nuestra presencia”, expresó el dirigente, Polivio Rosales.