Las inundaciones provocadas por lluvias extremas en Marruecos dejaron decenas de personas muertas, miles de damnificados y daños significativos en infraestructura, en uno de los episodios climáticos más severos registrados en el país en los últimos años. Las autoridades continúan con labores de rescate y evaluación de daños, mientras varias regiones permanecen en estado de alerta.
Las precipitaciones torrenciales afectaron principalmente zonas urbanas y rurales del norte y centro del país, donde el desbordamiento de ríos y sistemas de drenaje colapsados arrasó con viviendas, carreteras, puentes y cultivos. En algunos sectores, comunidades enteras quedaron incomunicadas debido a derrumbes y cortes en las vías de acceso.
Equipos de emergencia, fuerzas de seguridad y voluntarios trabajan en la evacuación de personas atrapadas y en la entrega de ayuda humanitaria. El gobierno marroquí activó protocolos de emergencia para atender a los damnificados, habilitar albergues temporales y restablecer servicios básicos como agua potable y electricidad.
Expertos y organismos internacionales han vinculado este tipo de eventos extremos al impacto del cambio climático, señalando que el aumento en la intensidad y frecuencia de las lluvias está elevando el riesgo de inundaciones repentinas en el norte de África. Marruecos, al igual que otros países de la región, enfrenta una mayor vulnerabilidad climática debido a la combinación de sequías prolongadas y episodios de precipitaciones intensas en cortos periodos de tiempo.
Organizaciones humanitarias advirtieron sobre las consecuencias sociales y económicas de la emergencia, especialmente para comunidades rurales que dependen de la agricultura y que perdieron cosechas, ganado y medios de subsistencia. Asimismo, hicieron un llamado a reforzar las políticas de prevención, planificación urbana y adaptación al cambio climático.
Las autoridades mantienen el monitoreo meteorológico ante la posibilidad de nuevas lluvias en los próximos días, mientras avanzan las labores de recuperación y se cuantifican las pérdidas ocasionadas por esta tragedia natural.

