
Autoridades capturan a seis personas, recuperan vehículos robados e incautan cientos de piezas tras la operación “San Antonio”, que evidenció una sofisticada estructura de comercialización ilegal de autopartes.
Bogotá, 16 de diciembre de 2025 — Las autoridades lograron desmantelar una organización criminal dedicada al hurto de autopartes y automóviles en la capital colombiana, gracias a la Operación “San Antonio”, liderada por la Dirección de Investigación Criminal e INTERPOL (DIJIN) en conjunto con la Fiscalía General de la Nación.
Durante más de 13 diligencias de allanamiento en sectores críticos como Barrios Unidos (La Paz y 7 de Agosto) y Los Mártires (La Favorita), las fuerzas del orden capturaron en flagrancia a seis personas señaladas de participar en el hurto y el tráfico de vehículos.
En el operativo también se recuperaron 16 vehículos hurtados, entre automóviles, motocicletas, camiones y un bus, y se incautaron 830 autopartes, que incluían sistemas eléctricos, motores y puertas de automóviles que, según las investigaciones, eran parte del mercado ilegal que alimentaba esta red criminal.
La investigación reveló un método sofisticado de operación: los implicados usaban locales comerciales como fachadas, en los cuales se instalaron ascensores de carga ocultos que permitían transportar motocicletas robadas a pisos superiores para desarmarlas. Las piezas extraídas eran luego trasladadas y almacenadas en otras edificaciones donde se vendían con apariencia de legalidad.
Las autoridades también avanzan en un proceso de extinción de dominio contra uno de los establecimientos vinculados con esta red, en un esfuerzo por atacar no solo a los responsables, sino también a la infraestructura económica que sostenía esta actividad delictiva.
Las cifras oficiales del hurto de vehículos y autopartes en 2025 muestran que 3.099 automotores fueron reportados como robados en el área metropolitana de Bogotá, lo que representa un promedio de nueve casos diarios. Aunque los datos sugieren una reducción de la tasa de hurto respecto al año anterior, el delito persiste como una preocupación de seguridad pública en la ciudad.
