El presidente Gustavo Petro prometió en campaña llevar educación superior pública al Catatumbo. Hoy, como mandatario, cumple ese compromiso con la llegada efectiva del Estado al territorio: nuevas aulas, alimentación digna y oportunidades reales de formación para miles de niños, niñas y jóvenes.
El Gobierno Nacional invierte $628.863 millones para garantizar el derecho a la educación desde la primera infancia hasta la educación superior. Estos recursos, enmarcados en la Conmoción Interior y el Pacto por el Catatumbo, ya generan impactos concretos en cobertura, calidad, infraestructura y bienestar escolar.
Infraestructura: aulas para la paz y el futuro
El Ministerio de Educación, a través del Fondo de Financiamiento de la Infraestructura Educativa (FFIE), impulsa 126 proyectos educativos en una región históricamente golpeada por el conflicto armado. Más de 30.000 estudiantes de El Tarra, Tibú, Teorama, El Carmen, San Calixto, Convención, Hacarí, Sardinata, Ocaña, El Zulia, Ábrego y La Playa se benefician con estas obras.
“Le estamos cumpliendo al futuro de Colombia. En el Catatumbo transformamos los entornos escolares para sacar de la guerra a niños, niñas y jóvenes, con espacios dignos y de calidad que se traducen en oportunidades reales de estudiar”, afirmó el ministro de Educación, Daniel Rojas Medellín.
En El Tarra, avanza en un 84% la construcción del Colegio – Universidad, eje de la Ciudadela del Conocimiento, que integrará la educación media con la formación técnica, tecnológica y universitaria. Esta obra contará con laboratorios, biblioteca, planta agroindustrial, zonas de bienestar y espacios recreativos, y se proyecta como símbolo de paz y conocimiento.
En Sardinata, la Institución Educativa Alirio Vergel Pacheco registra un 99% de ejecución, con nuevos ambientes de aprendizaje, un laboratorio integrado y una planta de procesamiento de alimentos que fortalecerá la formación técnica y el desarrollo productivo local.
El Catatumbo pasó de tener solo siete instituciones rurales intervenidas a un portafolio de 126 proyectos entre entregados, en ejecución y en estructuración. Entre ellos se encuentran las 20 sedes del resguardo indígena Motilón Barí, dentro de la estrategia Ruta de amor por el Catatumbo, que beneficia tanto a comunidades indígenas como campesinas.
Estas obras mejoran la calidad educativa y, al mismo tiempo, impulsan la economía local mediante la contratación de mano de obra del territorio, en articulación con líderes comunales, sociales y del pueblo Barí. Con ello, el Gobierno dinamiza el tejido social y fortalece la presencia institucional en esta zona priorizada del país.

