El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, elevó este martes la tensión diplomática al advertir que cualquier país que produzca y trafique drogas hacia su territorio —incluida Colombia— podría ser objeto de ataques militares. Sus declaraciones surgieron al finalizar una reunión con su Gabinete en la Casa Blanca.
“Colombia produce cocaína. Tienen plantas de fabricación y luego nos venden cocaína. Cualquiera que haga eso está sujeto a ataques, no solo Venezuela”, afirmó Trump ante la prensa, abriendo la puerta a acciones agresivas más allá de las ya anunciadas contra el gobierno de Nicolás Maduro.
La respuesta del presidente colombiano, Gustavo Petro, no tardó en llegar. Desde su cuenta en X, el mandatario rechazó de inmediato la amenaza y defendió los resultados de su política antidrogas:
“Sin misiles hemos destruido 18.400 laboratorios de cocaína. Venga conmigo y le enseño cómo se destruye un laboratorio cada 40 minutos, pero no amenace nuestra soberanía porque despertará al Jaguar. Atacar nuestra soberanía es declarar guerra”, expresó.
Petro también recordó que Colombia ha sido clave en la incautación de miles de toneladas de droga con destino a Estados Unidos, y advirtió que dañar dos siglos de relaciones diplomáticas sería un error histórico.
La declaración de Trump marca un nuevo punto de tensión con Colombia, principal productor mundial de cocaína. El presidente estadounidense ha cuestionado en varias ocasiones la estrategia antidrogas del gobierno de Petro y llegó a acusarlo, sin pruebas, de ser “líder del narcotráfico”. Washington sancionó al mandatario colombiano en octubre, incluyéndolo en la Lista Clinton —generalmente reservada para narcotraficantes y terroristas—, una decisión sin precedentes en la relación bi lateral.
El choque entre ambos gobiernos también ocurre en medio de la polémica por la operación militar estadounidense Lanza del Sur, desplegada en el Caribe y el Pacífico para atacar embarcaciones sospechosas de narcotráfico. Más de 80 personas han muerto en esas acciones, que la ONU calificó como violaciones al derecho internacional y “ejecuciones extrajudiciales”.
La tensión regional se incrementa mientras la Casa Blanca mantiene abierta la posibilidad de una intervención por tierra o aire en Venezuela. Aunque el objetivo declarado es Nicolás Maduro y el llamado Cartel de los Soles, las cifras contradicen el enfoque exclusivo sobre ese país: en 2024 Colombia produjo potencialmente 3.001 toneladas de cocaína, según un informe interno citado por este medio.
El deterioro entre Washington y Bogotá se profundizó desde que, en septiembre, Estados Unidos descertificó a Colombia como aliado en la lucha contra las drogas, rompiendo décadas de cooperación conjunta. Lo que antes fue una alianza estratégica hoy se transforma en un enfrentamiento directo, con el narcotráfico como principal detonante.

