La Fiscalía General de la Nación anunció este lunes 1 de diciembre de 2025 que impondrá cargos contra los exministros Ricardo Bonilla (Hacienda) y Luis Fernando Velasco (Interior), por su presunta participación en el escándalo de corrupción de la UNGRD.
Según el ente acusador, los exministros serán procesados por los delitos de concierto para delinquir agravado, interés indebido en la celebración de contratos y cohecho por dar u ofrecer.
La audiencia de formulación de cargos se realizará este lunes, de manera virtual, ante el Tribunal Superior de Bogotá, y está prevista para las 9:00 de la mañana.
Alegatos de la Fiscalía: contratos por 92.000 millones y “compra” de congresistas
La investigación indica que, durante su gestión, Bonilla y Velasco habrían intervenido en el direccionamiento de contratos por unos 92.000 millones de pesos, destinados a municipios como Cotorra (Córdoba), Saravena (Arauca) y El Carmen de Bolívar, con recursos dirigidos a la UNGRD.
De acuerdo con declaraciones de una exasesora —quien aceptó un principio de oportunidad con la Fiscalía—, estos contratos habrían sido entregados con la intención de beneficiar a ciertos congresistas para que votaran a favor de créditos solicitados por el Gobierno Nacional.
La Fiscalía sostiene que el esquema no fue un hecho aislado, sino que operó durante el tiempo en que ambos ocupaban sus cargos ministeriales, lo que evidencia “vocación de permanencia” del delito.
Petición de cárcel y consecuencias disciplinarias
Ante la magnitud de los hechos denunciados, la Fiscalía pedirá una medida de aseguramiento privativa de la libertad —es decir, prisión preventiva— contra Bonilla y Velasco.
Además, la imputación tendrá efectos inmediatos sobre los procesos disciplinarios abiertos en su contra ante la Procuraduría General de la Nación, lo que podría derivar en sanciones adicionales si se confirman las irregularidades.
Reacción del gobierno y vigilia del proceso
El presidente Gustavo Petro reaccionó afirmando que “no salió ni un peso”, en referencia al escándalo, y recordó que los funcionarios implicados ya habían sido removidos del cargo.
Mientras tanto, siguen bajo la lupa no solo los exministros, sino otros implicados en el entramado, como exdirectivos de la UNGRD y miembros del congreso que habrían recibido estos contratos.