Aunque aparece solo unos segundos en Hombres de Negro II, la historia detrás del cameo de Michael Jackson es casi tan curiosa como la película. Michael era fan declarado de la primera entrega y, cuando supo que habría secuela, pidió él mismo estar en la película.El director Barry Sonnenfeld contó que al principio pensaron en darle un papel más elaborado, incluso algo con maquillaje o efectos especiales. Pero Michael tenía una solicitud muy específica: quería usar el traje negro, las gafas y ser un Agente, no un alienígena. “Quiero ser un agente de verdad”, insistió.Al final, lo dejaron aparecer como el “Agente M” en un monitor, elegante y sonriente, justo como él quería. Fue un cameo breve, pero quedó como un detalle único para los fans de la saga… y de Michael.

