La conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer tuvo un profundo significado en el Distrito de Tumaco, donde la Secretaría de la Mujer, Equidad y Género, liderada por Silena Dájome, llevó a cabo la emotiva jornada ‘Un camino de faroles: almas que no están e iluminan la resistencia’.
Esta iniciativa, desarrollada en el marco del 25N, reunió a mujeres, lideresas sociales, organizaciones comunitarias y ciudadanía en general en un acto que mezcló memoria, reflexión y un llamado urgente a la acción.
Actividad
La actividad consistió en un recorrido iluminado por faroles elaborados por las mismas participantes, cada uno de ellos dedicado a las mujeres que ya no están a causa de la violencia basada en género, así como a aquellas que hoy continúan enfrentando situaciones de riesgo.
Con esta intervención simbólica, se buscó visibilizar las ausencias que marcan a muchas familias del Pacífico nariñense, pero también destacar la fuerza colectiva que sostiene la resistencia y la lucha por una vida digna.
Durante la jornada, se realizaron espacios de diálogo en los que se abordaron las realidades que viven las mujeres en el territorio, desde la violencia intrafamiliar y sexual, hasta las afectaciones derivadas del conflicto armado y el desplazamiento.
Desafíos
Asimismo, se reflexionó sobre los desafíos que enfrenta el Distrito para garantizar atención oportuna, acceso a rutas de protección y el fortalecimiento de procesos comunitarios que promuevan relaciones libres de violencias.
La secretaria Silena Dájome destacó que este ejercicio no solo constituye un acto de memoria, sino un escenario para reafirmar el compromiso institucional con la equidad de género y la defensa de los derechos humanos. Aseguró que la entidad seguirá impulsando programas de acompañamiento psicosocial, formación comunitaria y fortalecimiento de liderazgos.
Las participantes valoraron positivamente la iniciativa, resaltando que estos eventos fortalecen la unión, permiten sanar colectivamente y recuerdan la urgencia de seguir trabajando para erradicar todas las formas de violencia contra mujeres y niñas. Con este camino de faroles, Tumaco reafirmó su voluntad de avanzar hacia un territorio más justo, seguro y respetuoso de la dignidad de todas.