Colombia ha alcanzado un nuevo hito en su transición energética al superar los US$9 mil millones en inversiones destinadas a proyectos de energías renovables durante el último año. Con esta cifra, el país se consolida como uno de los líderes regionales en el desarrollo de energías limpias, según un informe publicado hoy por ColombiaOne.
Un cambio estructural en la matriz energética
El crecimiento sostenido de la inversión refleja un cambio profundo en la matriz energética nacional, tradicionalmente dominada por los combustibles fósiles. Hoy, más del 30 % de la nueva capacidad instalada proviene de fuentes solares, eólicas y biomasa, impulsadas tanto por capital nacional como extranjero.
Uno de los proyectos más destacados es una planta fotovoltaica de 201 MW, recientemente inaugurada en el departamento del Cesar por la empresa Atlas Renewable Energy. Esta planta podrá abastecer de energía limpia a más de 250.000 hogares, reduciendo miles de toneladas de emisiones de CO₂ al año.
Inversión, empleo y sostenibilidad
El Ministerio de Minas y Energía destacó que esta transformación no solo tiene beneficios ambientales, sino también económicos y sociales.
“Cada nuevo megavatio instalado representa más empleo, innovación tecnológica y oportunidades para las comunidades locales”, afirmó la ministra de Minas y Energía, Andrea Ariza.
Según el gobierno, la expansión de proyectos renovables ha generado más de 35.000 empleos directos e indirectos en los últimos dos años, especialmente en regiones con históricas dificultades de desarrollo. Además, el impulso a las energías limpias busca estabilizar las tarifas eléctricas y mejorar la resiliencia ante fenómenos climáticos como El Niño.
Colombia, referente regional
Con estos avances, Colombia se suma al grupo de países latinoamericanos que lideran la transición energética, junto a Chile, Brasil y Uruguay. Expertos del sector coinciden en que la estabilidad regulatoria y los incentivos fiscales han sido claves para atraer inversión, junto con el creciente interés de fondos internacionales en infraestructura verde.
La Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) estima que Colombia podría duplicar su capacidad de generación solar y eólica antes de 2030, siempre que mantenga el ritmo actual de inversión y mejore la conexión de estas plantas al sistema eléctrico nacional.