La novela de Mary Shelley fue publicada en 1818 y desde entonces ha inspirado al cine con una fuerza poco común: el relato del científico que fabrica vida y las consecuencias de su ambición sigue conmoviendo, asustando y provocando reflexión.
A continuación, siete películas que muestran la variedad de enfoques que ha tomado este mito, desde el terror puro hasta la comedia o la animación.
- La novia de Frankenstein (1935, James Whale): Una secuela que eleva el horror clásico con toques de melancolía y reflexión sobre la soledad del monstruo.
- La maldición de Frankenstein (1957, Terence Fisher): Representa el nacimiento del horror moderno gracias al color, los matices más violentos y el nuevo enfoque estético de los estudios Hammer.
- El jovencito Frankenstein (1974, Mel Brooks): Una comedia-homenaje que demuestra cómo el mito puede reinventarse para generar risas sin perder sus raíces.
- Carne para Frankenstein (1973, Paul Morrissey): Una versión más transgresora y vanguardista, que mezcla horror, erotismo y sátira, llevando el mito al límite.
- The Rocky Horror Picture Show (1975, Jim Sharman): Lleva el Frankenstein al terreno del espectáculo, la música, la cultura queer y la performance, demostrando su vigencia en la cultura pop.
- Frankenweenie (2012, Tim Burton): Una reinterpretación animada que introduce el mito al público más joven, sin perder el fondo emocional sobre la muerte, la creación y la diferencia.
- La séptima del listado (que completa este repaso) mezcla lo clásico con lo contemporáneo, consolidando cómo Frankenstein sigue vivo en el cine moderno. E
Estas películas permiten ver cómo un mismo tema —la creación, la ambición, la soledad, la monstruosidad— se transforma según la época, el estilo y la mano del director. La próxima vez que veas una de ellas, recuerda que no sólo estás frente a un “monstruo”, sino ante un espejo de lo humano.

