Este viernes 31 de octubre, coincidiendo con Halloween, se conmemora el Día Mundial del Lémur, una efeméride que va más allá de lo simbólico. Instaurada en 2014 por la Lemur Conservation Network, esta jornada se celebra cada último viernes de octubre y forma parte del Festival Mundial del Lémur, que se extiende durante todo el mes.
Un primate único y amenazado
Los lémures son primates endémicos de Madagascar, isla ubicada frente a la costa sureste de África. Se distinguen por sus grandes ojos, hocico alargado y una sorprendente diversidad de tamaños y colores. Actualmente, se han identificado más de 100 especies, muchas de ellas con comportamientos sociales únicos.
Sin embargo, su situación es crítica: el 95% de las especies está en peligro de extinción, según un estudio genómico realizado por científicos de Estados Unidos, México y otros países. La deforestación, la caza ilegal, el tráfico de especies y el cambio climático son las principales amenazas que enfrentan.
¿Por qué son tan importantes?
Los lémures cumplen funciones ecológicas esenciales. Ayudan a dispersar semillas, polinizan plantas nativas y mantienen el equilibrio de los bosques tropicales. Su desaparición tendría consecuencias irreversibles para el ecosistema de Madagascar.
Actividades globales por su protección
Durante el Día Mundial del Lémur, se organizan actividades educativas, conferencias, exposiciones, campañas en redes sociales y programas de reforestación en Madagascar y otros países. En España, por ejemplo, la Fundación BIOPARC se suma con eventos en sus parques de conservación en Valencia, Fuengirola y Gijónfundacionbioparc.org.
Además, este año la Lemur Conservation Network ha promovido iniciativas creativas como desafíos artísticos, disfraces temáticos y hojas para colorear con motivo de Halloween, buscando involucrar a niños y adultos en la causa.
Un llamado a la acción
La celebración no solo busca visibilizar a estos carismáticos animales, sino también movilizar esfuerzos concretos para su conservación. Desde apoyar proyectos locales hasta educar sobre la importancia de la biodiversidad, cada gesto cuenta.
Este 31 de octubre, el Día Mundial del Lémur nos recuerda que proteger a una especie es proteger un ecosistema entero. Y que, en medio del ruido global, aún hay tiempo para escuchar el llamado de quienes no tienen voz.

