Durante las últimas 72 horas, intensas lluvias han provocado graves estragos en el norte del estado de Veracruz (México), dejando a múltiples comunidades incomunicadas tras desbordamientos de ríos e inundaciones que afectan viviendas, cultivos y vías de acceso.
Algunos de los municipios más afectados son Poza Rica y Álamo, donde las crecidas de los afluentes colindantes anegaron calles, barrios ribereños y zonas agrícolas cercanas. En localidades rurales como Chahuatlán, se reporta que más de 500 familias permanecen aisladas, sin servicios de comunicación, luz eléctrica ni vías transitables.
Habitantes afectados claman por ayuda urgente. “Estamos desesperados al no saber de nuestros familiares”, dijeron algunas personas, quienes además reportan temor por la falta de accesos seguros y la escasez de víveres y medicinas.
Las autoridades mexicanas han activado planes de emergencia para atender la crisis. La Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) informó que ya se desplegaron operativos como el Plan DN-III-E, el Plan Marina y acciones de la Guardia Nacional, con apoyos logísticos y equipos de rescate en zonas prioritarias. Además, se han enviado recursos para evaluar daños estructurales, reforzar zonas vulnerables y restablecer comunicaciones lo antes posible.