El debate sobre si el presidente Gustavo Petro está incursionando activamente en la arena política para fortalecer su proyecto de continuidad ha cobrado fuerza tras recientes discursos, intervenciones públicas y gestos desde su gabinete. Un artículo de El Espectador analiza las señales que despiertan preocupación entre sectores críticos y observadores de la institucionalidad.
Señales que alimentan la polémica
- Discurso a favor del “poder constituyente”
Desde Ibagué, Petro reiteró la necesidad de convocar a mecanismos que profundicen reformas, incluyendo la posibilidad de una nueva constitución. - Referencias a reelección política
Aunque el mandatario ha dicho públicamente que no podrían reelegirlo bajo el sistema actual, ha hecho declaraciones retóricas donde afirma que “a cualquiera podría ganarle en elecciones”, lo que algunos interpretan como insinuaciones hacia su continuidad de facto. - Apoyo desde el gabinete
Figuras como los ministros del Interior (Armando Benedetti) y de Justicia han manifestado que se trata de mecanismos de democracia participativa, sugiriendo vías para constitucionalizar reformas a la salud, la justicia y otros temas estructurales. - Propuestas ciudadanas y recolección de firmas
Se menciona la posibilidad de que grupos de ciudadanos promuevan proyectos que podrían derivar en reformas constitucionales o consultas populares, con respaldo oficial indirecto. - Alertas institucionales
Organismos de control, como la Procuraduría, han emitido llamados para que las expresiones políticas del gobierno se mantengan dentro del marco de la ley y sin invadir funciones del Congreso o alienar la institucionalidad.
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