Un fuerte terremoto de magnitud 6,9 sacudió este martes la región central de Filipinas, dejando un saldo preliminar de 69 personas fallecidas y más de 150 heridos, según informaron las autoridades locales.
El epicentro del sismo se ubicó cerca de la ciudad de Bogo, en la isla de Cebú, a una profundidad de aproximadamente 10 kilómetros, lo que intensificó los efectos destructivos en la superficie.
Las zonas más afectadas incluyen los municipios de San Remigio, Medellín y Bantayan, donde se reportaron derrumbes de viviendas, iglesias centenarias y centros educativos. Equipos de rescate continúan buscando sobrevivientes entre los escombros.
El gobierno ha declarado el estado de calamidad en las provincias afectadas y ha movilizado personal militar, voluntarios, guardacostas y ayuda humanitaria. Se han reportado cortes de electricidad, daños en carreteras y problemas en las telecomunicaciones.
Este desastre se suma al reciente paso del tifón Bualoi, que dejó 14 víctimas fatales en el país hace apenas una semana.