Remedios naturales para calmar la tos: cinco opciones respaldadas por la ciencia

La tos, especialmente la que queda tras un resfriado o una infección respiratoria, puede ser molesta y persistente. Aunque la miel es uno de los recursos más conocidos, existen otras alternativas naturales que también han demostrado ser eficaces y que pueden ser especialmente útiles en niños mayores de un año y adultos. Aquí te compartimos cinco remedios naturales con base científica que pueden ayudarte a aliviar la tos de forma segura y efectiva.

🌿 1. Llantén (Plantago lanceolata)

Esta planta contiene compuestos que calman la irritación en la garganta. Sus propiedades protectoras ayudan a formar una capa sobre las mucosas, lo que reduce el impulso de toser y alivia la inflamación local.

🌿 2. Grindelia

Es una planta con efectos expectorantes. Su acción ayuda a suavizar las vías respiratorias y facilita la expulsión del moco. Además, tiene un leve efecto calmante que puede disminuir la frecuencia de la tos.

🌿 3. Pelargonium (Pelargonium sidoides)

Esta planta de origen africano tiene propiedades antivirales y estimula las defensas del cuerpo. Su extracto ha mostrado beneficios en casos de bronquitis y tos persistente, ayudando a reducir los síntomas y acelerar la recuperación.

🌱 4. Aceite esencial de menta

El mentol que contiene genera una sensación de frescor que alivia la garganta y ayuda a despejar las vías respiratorias. Puede usarse en vapores, difusores o incluso diluido en aceites vegetales para masajes en el pecho.

🌱 5. Aceite esencial de eucalipto

Ideal para descongestionar. Se utiliza comúnmente en inhalaciones de vapor para abrir los bronquios y facilitar la respiración, lo que reduce la tos causada por acumulación de mucosidad o congestión nasal.

🧉 Formas de uso recomendadas

  • Infusiones: Las plantas pueden prepararse en forma de té y consumirse dos o tres veces al día.
  • Inhalaciones: Añadir unas gotas de aceites esenciales en agua caliente e inhalar el vapor.
  • Jarabes naturales: Algunas de estas plantas se pueden encontrar en forma de jarabes combinados, ideales para niños y adultos.
  • Compresas o masajes: Los aceites esenciales, bien diluidos, pueden aplicarse en el pecho o espalda para facilitar la respiración.