En esta sección de Impulso, queremos presentar rostros que quizás no aparecen en portadas ni ocupan titulares, pero cuyo trabajo cotidiano transforma realidades. Son líderes silenciosos, personas comunes con acciones extraordinarias que empoderan comunidades, inspiran procesos y siembran futuro. Desde el arte, la educación, la cultura, la gestión social o el emprendimiento, su labor merece ser contada.
Hoy, los sacamos del anonimato para darles el lugar que se han ganado con esfuerzo, sensibilidad y compromiso.
Neyip Oñate: El liderazgo que transformó a EMPOPASTO
En tiempos donde la confianza en lo público muchas veces se ve cuestionada, el gerente de EMPOPASTO, Neyip Oñate, demuestra que una gestión transparente, técnica y comprometida puede marcar la diferencia. Bajo su liderazgo, la empresa ha logrado un hito histórico: pasar de una calificación A- a A+ en el análisis de riesgo financiero. Más allá de una simple letra, este salto significa una transformación profunda y sostenida.
Pasar de una calificación “positiva” a “estable” refleja que hoy EMPOPASTO es una empresa sólida, con capacidad de cumplir sus obligaciones financieras, operar con eficiencia y ofrecer garantías reales a sus usuarios y contratistas. Es, en esencia, una empresa que inspira confianza.
Este logro no es casualidad. Es el resultado de decisiones estratégicas, orden administrativo y una visión clara de sostenibilidad. Es también un mensaje poderoso: cuando hay liderazgo con sentido de responsabilidad, las instituciones pueden fortalecerse desde adentro.
Neyip Oñate no solo ha mejorado números; ha restaurado la credibilidad de una entidad fundamental para la región. Hoy, gracias a su gestión, EMPOPASTO no solo es financieramente viable, sino que se proyecta como una empresa confiable, con respaldo técnico y humano, capaz de enfrentar los desafíos del futuro.
El camino hacia la excelencia continúa, pero este avance deja una huella imborrable: la de un gerente que entendió que liderar es servir con honestidad, capacidad y corazón.