El partido entre La Equidad y Deportivo Pasto, válido por la novena fecha de la Liga 2025-II, se desarrolló en el estadio de Techo en Bogotá y se caracterizó por un ambiente tenso y una marcada falta de eficacia ofensiva.
El resultado final de 0-0 refleja, más que la incapacidad para anotar, un enfrentamiento que estuvo plagado de interrupciones y decisiones arbitrales que influyeron en el desarrollo del juego.
Desde el inicio, el encuentro prometía ser complicado. Ambos equipos llegaron con la necesidad imperiosa de sumar puntos para mejorar su situación en la tabla; mientras que Pasto se encontraba en la incómoda posición de puesto 18 con solo seis unidades, Equidad ocupaba el puesto 13 con diez puntos. Esta presión se tradujo en un juego muy físico y cortado, donde la estrategia se impuso al espectáculo.
La primera media hora estuvo marcada por la contención y las faltas, lo que ya comenzaba a evidenciar la tensión que se vivía en la cancha. No fue hasta el minuto 83 que los espectadores pudieron observar el primer remate directo al arco, evidencia de la escasa claridad y creatividad que ambos equipos mostraron para crear ocasiones de peligro. El Deportivo Pasto, a pesar de no conseguir el remate final, fue el que más intentó llegar al área rival, pero la resistencia defensiva de Equidad fue sólida.
Las expulsiones
A medida que avanzaba el partido, la frustración comenzó a hacerse presente; los jugadores de ambos equipos empezaron a discutir entre sí, lo que resultó en un elevado número de faltas señaladas por el árbitro.
La situación se tornó insostenible cuando Facundo Boné y Joyce Esteban Ossa de Pasto, junto con Jean Carlos Colorado y Joider Micolta de Equidad, fueron expulsados. Esto dejó a ambos conjuntos con diez hombres en el campo, alterando aún más el ritmo del juego y propiciando un escenario en donde las especulaciones sobre la falta de capacidad para mantener la calma en momentos cruciales emergieron como un tema relevante.
Segundo tiempo
En la parte complementaria, las demoras para reiniciar el juego tras cada falta parecían no tener fin, afectando la dinámica del choque y contribuyendo a un ambiente cada vez más tenso. Los jugadores mostraron signos de frustración y agotamiento, lo que generó un juego lento y predecible, lejos del espectáculo que esperaban los aficionados.
El empate 0-0 deja a ambos equipos en una situación ambivalente. Por un lado, Deportivo Pasto continúa luchando por salir de la zona de descenso, sin embargo, su esfuerzo por buscar el gol frente a un rival que se defendió con orden es digno de reconocimiento. Por otro lado, La Equidad, a pesar de contar con un punto adicional, no logra encontrar el camino hacia la consistencia necesaria para escalar posiciones en la tabla.
Próxima jornada
Este partido es un recordatorio de que, en el fútbol, el resultado no siempre refleja la intensidad que se vive en el campo. Si bien el cero a cero podría interpretarse como un marcador que castiga la falta de gol, también es testimonio de la combatividad de dos equipos que, a pesar de sus dificultades, lucharon con determinación por obtener un resultado positivo.
La próxima jornada será crucial para ambos conjuntos, quienes deberán replantear sus estrategias y trabajar en la disciplina dentro de la cancha. La Equidad necesita urgentemente encontrar ese equilibrio entre defensa y ataque, mientras que Deportivo Pasto deberá aprovechar su capacidad ofensiva y transformar intentos en goles si desea abandonar los últimos puestos de la clasificación.
En conclusión, el empate en Bogotá fue un reflejo de un choque en el que prevalecieron las emociones y la lucha por la supervivencia antes que el buen juego. Las lecciones aprendidas serán vitales para el futuro de ambos equipos, que esperan dejar atrás la mediocridad de un partido sin goles. A medida que avanza la liga, la presión por sumar se intensifica, y tanto La Equidad como Deportivo Pasto tendrán que encontrar respuestas, y rápido, si desean evitar complicaciones mayores en la temporada.