Oswaldo Navarro: el psicólogo que une la clínica y los medios para salvar vidas

En un mundo donde la información se consume a la velocidad de un clic y las noticias se olvidan en segundos, hay un tema que no puede quedar relegado: la salud mental. En Pasto y en toda la región de Nariño, hablar de psicología en los medios se ha convertido en una necesidad urgente para enfrentar problemas como la depresión, la ansiedad, las adicciones y el suicidio, que cada día golpean más fuerte a la comunidad.

Quien entiende este desafío a la perfección es el psicólogo clínico Oswaldo Navarro, un profesional talentoso que ha sabido tender puentes entre la clínica y la sociedad. Su visión es clara: la psicología no puede limitarse a los consultorios, tiene que salir a la calle, a las emisoras, a los periódicos y a las redes sociales para convertirse en una herramienta al servicio de todos.

“Cada vez que los medios hablan de salud mental, no solo informan: están salvando vidas”, asegura Navarro, quien ha trabajado de la mano con medios regionales como el Diario del Sur, reconociendo en este periódico un actor clave para visibilizar las problemáticas emocionales que enfrentan niños, jóvenes y adultos.

El impacto de estas iniciativas ya se siente. Padres que antes no comprendían a sus hijos encuentran en columnas y reportajes respuestas que les abren caminos. Jóvenes que cargaban con el peso del silencio descubren que no están solos. Personas que atraviesan duelos o heridas emocionales hallan en la palabra mediática un primer paso para buscar ayuda profesional.

Para Navarro, la unión entre psicología y medios no es una moda, sino un acto político, social y cultural que permite transformar realidades. “La indiferencia nunca será solución. Hablar de salud mental en voz alta es reconocer la dignidad humana y construir comunidad”, enfatiza.

Así, la labor de profesionales como Oswaldo Navarro y la apuesta de medios comprometidos reafirman una verdad poderosa: la psicología en los medios no es un lujo, es una alianza que salva vidas y que hoy se convierte en pilar de esperanza para Nariño.