La senadora Esmeralda Hernández presentó una proposición para quitar la placa que rinde homenaje al expresidente Álvaro Uribe Vélez en el Capitolio Nacional. Argumentó que en la “casa de la democracia” no se puede exaltar a un “delincuente condenado”. Proposición en el Congreso para retirar la placa de Álvaro Uribe.
Hernández recordó que el exmandatario recibió una condena de 12 años por fraude procesal y soborno en actuación penal. Para ella, mantener esta placa es una afrenta a las víctimas de su gobierno y una señal de impunidad en el Congreso.
Cuestionamientos por la legalidad de la placa
La congresista explicó que la instalación de la placa en 2019, durante la presidencia del Senado de Ernesto Macías, careció de sustento legal. Señaló que no existió acto administrativo ni cumplimiento de los requisitos que exige la Ley Quinta de 1992 para este tipo de reconocimientos.
Además, Hernández denunció que el acto ignoró normas que prohíben homenajes a funcionarios activos, ya que Uribe aún era senador cuando se instaló la placa. Considera que el hecho representó un “capricho político” y un irrespeto hacia la memoria de las víctimas del conflicto.
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Llamado a la memoria y a la coherencia institucional
La senadora afirmó que Uribe simboliza hechos graves como los falsos positivos, las interceptaciones ilegales a la oposición y los escándalos de corrupción como la Yidispolítica. Por eso, pidió que el Congreso actúe en coherencia con la justicia y retire el homenaje de inmediato.
Hernández insistió en que el Capitolio debe rendir tributo a las víctimas y no a quienes están señalados por crímenes de lesa humanidad. “La justicia ya hizo su parte. Ahora le corresponde al Congreso dar ejemplo y quitar la placa”, concluyó.