En Pasto, tierra de tradiciones profundas y sonidos ancestrales, también palpita con fuerza el ritmo del rock. Aunque muchos la asocian con tríos, bambucos o carnaval, en sus calles y escenarios alternativos resuenan guitarras eléctricas, baterías poderosas y letras que expresan rebeldía, sueños y luchas. Desde hace años, una escena rockera diversa y vibrante ha venido creciendo, abriéndose paso con autenticidad y talento. En esta edición, presentamos algunas de las bandas que hacen parte de este movimiento musical en Pasto: agrupaciones que, desde el garaje o el estudio, siguen demostrando que el rock también late en el corazón del sur.
Insurrección, mantiene una tensión constante entre la brutalidad técnica del death metal con la rabia directa del hardcore, canalizando un discurso crudo sobre la deshumanización en el conflicto. Su EP Crónicas de Hostilidad y su álbum Total Desolación crean un sonido visceral con riffs cortantes y letras que confrontan la historia sin filtros.
Aucaorvux, una banda de Black Metal Ritual de la Montaña de Pasto, Nariño, formada en 2019 y consolidada en 2021, fusiona la oscuridad del Black Metal con el misterio del Volcán Galeras y rituales ancestrales, usando voces guturales y performances inspirados en el mito del niño Auca y los cuervos Hunin y Munin. Sus letras abordan la muerte, espiritualidad, naturaleza y críticas a la religión.
Las tres piedras, formada en 2019 en Pasto, combina rock, grunge, groove rock, metal y noise con bajo, batería, sintetizadores y voz femenina. Inspirada en el territorio de los Pastos, su propuesta rompe esquemas con ruido y polirritmia. Ha participado en festivales como Rock al Parque 2022, Quito Fest 2024 y mercados como Bogotá Music Market 2023, siendo reconocida por medios como Radiónica como una destacada banda de rock colombiana.
La Casa de Juana, banda nariñense de reggae-ska fusión con siete años de trayectoria, originada en Pasto, combina reggae, ska, ritmos latinos y autóctonos para transmitir mensajes sociales, animalistas y de justicia. Su sonido, inspirado en el entorno urbano y rural, promueve respeto, unidad y cambio positivo, buscando ser aliados creativos para fortalecer la música regional nariñense.

