¿Sister Hong podría enfrentar la pena de muerte en China? El hermetismo judicial rodea el caso: El caso de ‘Sister Hong’, nombre por el que se conoce a Jiao Moumou, un hombre de 38 años que durante al menos cuatro años se hizo pasar por mujer para concretar encuentros sexuales con otros hombres, grabarlos sin su consentimiento y vender el contenido, sigue generando incertidumbre, especialmente sobre la posibilidad de que enfrente la pena de muerte. Actualmente, Jiao Moumou se encuentra detenido y bajo la custodia de las autoridades chinas, a la espera de un juicio. Sin embargo, el gobierno ha manejado el caso con hermetismo, sin ofrecer detalles sobre los cargos específicos que enfrentará en un país conocido por su rígido sistema penal.
La elaborada estrategia de engaño y el alto número de víctimas
Jiao Moumou implementó una compleja estrategia de engaño. Se hacía pasar por una mujer divorciada en una situación económica precaria, una fachada que le permitía solicitar alimentos, despensas, pequeños electrodomésticos o regalos menores a cambio de los encuentros íntimos, en lugar de dinero. Lo que sus víctimas desconocían era que él registraba en video, sin su consentimiento, esas relaciones para luego vender el contenido en una plataforma de pago. Medios internacionales estiman que el número de hombres afectados por esta práctica fraudulenta podría ascender a 250 personas, lo que subraya la magnitud de su operación ilegal.

¿Sister Hong podría enfrentar la pena de muerte en China? El hermetismo judicial rodea el caso
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La pena de muerte en China y los posibles cargos para ‘Sister Hong’
Hasta el momento, no existe información oficial que sugiera que Jiao Moumou, alias ‘Sister Hong’, podría enfrentar la pena de muerte. El proceso judicial en su contra aún no comienza formalmente, y se desconocen los cargos específicos que presentará la fiscalía. Sin embargo, se especula que podría ser acusado de fraude, estafa, distribución de contenido pornográfico y violación a la privacidad de sus víctimas. Si bien estos delitos no suelen estar directamente asociados con la pena capital, organizaciones civiles y activistas por los derechos humanos advierten sobre la posibilidad de interpretaciones estrictas de la ley china para imponer sanciones severas.
Reducción de delitos capitales en China, pero aún amplia lista
El sistema penal chino es conocido por su severidad, incluida la aplicación de la pena de muerte para un amplio abanico de delitos. Según el Observatorio de la Política China, en 2011, una reforma redujo de 68 a 55 los delitos capitales, eliminando 13 figuras delictivas. Posteriormente, en 2015, el código penal se modificó nuevamente para suprimir otros nueve delitos capitales, dejando el total en 46. Para 2020, la lista se redujo aún más, quedando en 42 delitos que pueden ser castigados con la pena capital. Estos delitos abarcan desde crímenes contra el Estado y la seguridad pública hasta actos violentos contra las personas, delitos económicos, militares y de corrupción.

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Implicaciones del caso y la seguridad pública
El caso de ‘Sister Hong’ pone en el centro de atención no solo la vulneración de la privacidad y los delitos relacionados con la distribución ilegal de contenido, sino también las posibles ramificaciones legales bajo un sistema penal tan estricto. Un cargo que podría aplicarse en contextos inusuales es el de “poner en grave peligro la seguridad pública”. Sin embargo, hasta ahora no hay indicios de que ese sea el cargo para Jiao Moumou. Mientras el proceso judicial avanza, las autoridades chinas mantienen reserva sobre los cargos específicos y el posible desenlace, lo que aumenta la incertidumbre sobre el futuro de ‘Sister Hong’ y las implicaciones de su caso en el debate sobre la ética sexual y la privacidad en la era digital.

