El departamento de Nariño vive una semana clave en su apuesta por la construcción de paz territorial. Desde el lunes 21 y hasta el viernes 25 de julio, el reconocido mediador internacional Gianni La Bella, miembro destacado de la Comunidad de Sant’Egidio, visita esta región del suroccidente colombiano como parte de una agenda diplomática sin precedentes que busca fortalecer los procesos de reconciliación y diálogo social impulsados por el Gobierno Nacional.
La presencia de ‘La Bella’, teólogo, académico e investigador con experiencia en procesos de paz en América Latina, África y Europa, marca un hito para Nariño al convertirse en epicentro de una misión internacional que no solo observa, sino que respalda activamente los esfuerzos territoriales de paz.
Conversaciones
La visita, fruto de la gestión del Gobierno Departamental, incluye encuentros en Pasto, Samaniego, Tumaco e Inda Zabaleta (corregimiento del municipio de Tumaco), donde el líder europeo sostendrá conversaciones directas con comunidades campesinas, pueblos indígenas, afrodescendientes, organizaciones sociales y actores vinculados a los Diálogos Regionales de Paz.
“Hemos logrado que Nariño entre al radar diplomático internacional. Esta es una oportunidad para visibilizar lo que se hace bien desde los territorios y sumar voces por la paz y la dignidad”, expresó Fredy Andrés Gámez Castrillón, secretario de Gobierno departamental, al resaltar la relevancia de esta misión.
La agenda no se limita a recorridos por el territorio. También se contemplan reuniones estratégicas con la Comisión de Paz del Senado, el Alto Comisionado para la Paz, representantes de la Unión Europea, delegados del clero, universidades, gremios productivos y alcaldes de los municipios priorizados en los programas de paz del Gobierno Nacional.
Labor humanitaria
‘La Bella’, ampliamente respetado en el ámbito diplomático por su rol en mediaciones de alto impacto, representa con su presencia un respaldo político, ético y simbólico al proceso de reconciliación en el sur del país. Su papel en la Comunidad de Sant’Egidio organización católica con sede en Roma reconocida por su labor humanitaria y mediadora añade una dimensión espiritual a esta visita, alineada con los valores de respeto por la vida, la justicia social y la construcción colectiva del bienestar.
Experiencia
Con esta histórica visita, Nariño se proyecta como un territorio clave en el avance del posconflicto, promoviendo una narrativa distinta a la que por años ha sido asociada al conflicto armado: una narrativa basada en la participación comunitaria, la dignificación de las víctimas y el diálogo como herramienta transformadora.
El gobierno departamental confía en que esta experiencia impulse mayores compromisos internacionales y abra nuevas puertas de cooperación para seguir consolidando la paz desde abajo, con las comunidades como protagonistas.
Esta visita diplomática también refuerza la importancia de una paz con enfoque territorial, un modelo que reconoce las particularidades culturales, sociales y económicas de regiones como Nariño, históricamente golpeadas por el conflicto armado, pero también resilientes y activas en la construcción de futuro.

