En un acto cargado de emoción, identidad y gratitud, la Cámara de Comercio de Ipiales fue escenario del homenaje a Carlos Pantoja Revelo, exalcalde, líder social y escritor ipialeño, quien a sus 87 años continúa siendo una figura viva de la historia local. El evento, más que una ceremonia, se convirtió en un ejercicio de memoria colectiva y reconocimiento a una vida dedicada al servicio, la palabra y la comunidad.
Al homenaje asistieron amigos entrañables, familiares, gestores culturales y ciudadanos que han acompañado de cerca el legado de Carlos Pantoja. Su figura representa no solo a una generación de luchadores sociales, sino a un tiempo en que la palabra escrita era un acto de compromiso con el territorio. Las intervenciones de los asistentes recordaron el peso de sus gestos, su voz crítica, y su labor en pro del bienestar colectivo desde la administración pública y la literatura.
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Durante el acto se realizó el lanzamiento de su más reciente obra, el libro “Mi Cuento del 60”, una narración breve que rescata vivencias personales de su niñez, marcadas por sueños de transformación y esperanza. A través de una prosa sencilla pero profunda, el autor reconstruye pasajes de una época en la que las calles de Ipiales eran testigos del surgimiento de liderazgos auténticos, cargados de sensibilidad social. El libro es un reflejo de la memoria personal entretejida con la historia de una ciudad en permanente búsqueda de justicia y dignidad.
El evento concluyó con una emotiva firma de libros, fotografías, abrazos y palabras de afecto que desbordaron gratitud hacia un hombre que ha dejado huella. Para muchos, Carlos Pantoja Revelo no solo es un referente de lucha, sino también un símbolo de la capacidad de resistencia que se forja a través de la escritura y el compromiso ético.
La jornada fue un llamado a valorar a quienes han sembrado con hechos y palabras, y a comprender que recordar a los nuestros es también un acto de justicia con la historia local. En tiempos donde la inmediatez parece borrar las raíces, el legado de Pantoja sigue recordando que solo quienes cuentan su propia historia pueden trazar su destino.