En las instalaciones de la Casa de Ejercicios San Ignacio, en la ciudad de Pasto, se celebró un momento significativo para la Fundación Suyusama: la posesión del nuevo director, el magíster Luis Javier Rodríguez Jurado. La ceremonia, que reunió a miembros de la Compañía de Jesús, representantes comunitarios, aliados institucionales y colaboradores de la organización, no solo fue un acto de formalidad, sino también un gesto profundo de esperanza y renovación.
La jornada dio inicio con una eucaristía en acción de gracias, presidida por el padre Hermann Rodríguez, Provincial de la Compañía de Jesús en Colombia. El ambiente estuvo cargado de espiritualidad, cercanía y un profundo sentido de misión compartida. Tras la misa, se realizó un brindis fraterno, en el que los asistentes celebraron el comienzo de una nueva etapa para Suyusama, una obra social con dos décadas de trayectoria en los territorios del suroccidente colombiano.
Experiencia
Luis Javier Rodríguez Jurado no es ajeno al compromiso con las causas sociales y ambientales. Su experiencia como magíster en áreas del desarrollo, su enfoque en la educación popular y su visión territorial lo convierten en un actor clave para continuar el legado que Suyusama ha construido junto a las comunidades rurales de Nariño. Su nombramiento significa también la voluntad de fortalecer los lazos entre espiritualidad, ecología integral y acción transformadora, pilares fundamentales de la propuesta de la Compañía de Jesús.
Entidades
Durante su discurso de posesión, Rodríguez Jurado expresó su gratitud por la confianza depositada en él y reafirmó su compromiso de caminar junto a las comunidades, organizaciones sociales y entidades aliadas en la búsqueda de un desarrollo justo, solidario y sostenible. “Este es un momento de continuidad, pero también de apertura a nuevas búsquedas, de seguir construyendo paz desde la vida cotidiana, desde la tierra, desde el agua, desde las relaciones humanas que dignifican”, señaló. La Fundación Suyusama ha sido reconocida por su enfoque de acompañamiento a procesos de transformación territorial, centrados en el fortalecimiento del tejido comunitario y el cuidado integral de la vida. Su trabajo se ha basado en una pedagogía participativa que promueve la autonomía local, la soberanía alimentaria, la gestión responsable del agua, y el desarrollo de economías solidarias.

