Julio Pantoja, líder de la JAC del barrio Aranda III, pidió explicaciones a las autoridades sobre el estancamiento de obras en varios sectores.
En medio del inconformismo de varios sectores de la comuna Diez de Pasto, el líder comunal Julio Pantoja, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Aranda III, denunció públicamente el abandono de obras de pavimentación que iniciaron en 2022 bajo contrato con el Departamento de Prosperidad Social. Según el dirigente, existen estudios técnicos y avances administrativos que no justifican la paralización actual de los trabajos.
Contratación
Pantoja explicó que la Secretaría de Infraestructura de Pasto, junto con la ingeniera encargada, Jessica, realizó en su momento el respectivo estudio de suelos y la topografía del terreno en Aranda III. Estas etapas técnicas fueron contempladas dentro del contrato suscrito en 2022 bajo el nombre «Nariño 2022», donde también estaban consignadas las pólizas correspondientes para garantizar el cumplimiento de la obra.
Según el líder, a raíz del incumplimiento contractual, el ingeniero responsable fue multado con 1.500 millones de pesos, recursos que fueron recuperados gracias a la activación de las pólizas de garantía. Sin embargo, a pesar de la sanción y del respaldo financiero ya ejecutado, las obras no han sido retomadas ni reprogramadas, generando preocupación entre los habitantes de los barrios involucrados.
Afectaciones
Además del barrio Aranda III, las obras inconclusas afectan a los sectores de Nueva Colombia, San Carlos, Altos de Chapalito y Caicedo Bajo, todos ellos priorizados en el mismo contrato inicial. «No entendemos por qué, si ya se ejecutaron estudios y se recuperaron recursos mediante pólizas, las obras siguen detenidas. Lo único que pedimos es que no se pierda la plata y que los trabajos se adelanten por el bien de nuestras comunidades», señaló Pantoja.
Los vecinos han manifestado su preocupación por el deterioro de las vías intervenidas a medias, la falta de respuesta clara por parte de las autoridades, y el riesgo de que los recursos no sean reinvertidos en los sectores afectados. La comunidad teme que, si no se actúa pronto, los avances alcanzados se pierdan y se vuelva a empezar desde cero en futuras administraciones.
Solicitud
Los líderes comunales de los barrios involucrados hacen un llamado al Departamento de Prosperidad Social, a la Gobernación de Nariño y a la Alcaldía de Pasto para que aclaren el estado del proyecto y garanticen la reactivación inmediata de las obras. Así mismo, instan a la Secretaría de Infraestructura a brindar un informe técnico actualizado que explique las razones por las cuales no se ha dado continuidad a un proyecto que ya cuenta con estudios, sanciones ejecutadas y recursos recuperados.
Los habitantes de Aranda III y demás barrios impactados reiteran que su interés no es señalar culpables, sino defender el derecho colectivo al desarrollo urbano y exigir que se respete el compromiso institucional con sus comunidades. En sus palabras: “no queremos que la plata se pierda; queremos soluciones concretas y que terminen lo que comenzaron”.

