Luego del cierre de los alegatos finales en el juicio contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez, acusado de presunto fraude procesal y soborno a testigos, se intensificó el cruce de señalamientos entre el Centro Democrático e Iván Cepeda, senador del Pacto Histórico y representante de las presuntas víctimas en el proceso.
A través de un comunicado en su cuenta oficial de X (antes Twitter), el partido del expresidente salió en defensa de su líder, señalando que no existe ninguna prueba —ni en audios, interceptaciones ni testimonios— que lo vincule con instrucciones para manipular testigos. Por el contrario, aseguraron que Uribe siempre solicitó que las declaraciones fueran verídicas, aun si le resultaban adversas.
Críticas a Cepeda y defensa de la gestión de Uribe
En el pronunciamiento, el Centro Democrático cuestionó duramente a Cepeda, acusándolo de tergiversar los hechos y de sostener una “obsesión” política por destruir la imagen del expresidente.
“No hay una sola comunicación pública ni privada en la que Uribe haya instruido a un testigo para mentir o callar”, aseguró el partido, que también recordó que el propio Uribe exigió en su momento que las gestiones del abogado Diego Cadena fueran públicas.
El comunicado también desestimó las afirmaciones de Cepeda sobre supuestos vínculos del expresidente con estructuras paramilitares, argumentando que fue el propio gobierno de Uribe el que lideró la extradición de varios jefes de esas organizaciones, entre ellos Salvatore Mancuso.
Respuesta de Iván Cepeda
Por su parte, el senador Cepeda respondió rechazando lo que considera una presión política indebida sobre el sistema judicial y una campaña sistemática de desprestigio.
“Invito al Centro Democrático a sosegarse. No podrán doblegarme con agravios, falsos testigos o amenazas. Ya culminó el juicio. Ahora vendrá el fallo. Lo que viene es respetar la justicia y acatarla. Sin ira ni odio”, expresó a través de sus redes sociales.
Cepeda también acusó al uribismo de intentar silenciarlo durante años, recordando que desde 2012 ha enfrentado una ofensiva legal y política encabezada por el expresidente.
El origen del proceso
El proceso judicial contra Uribe, que entró en su recta final esta semana, tiene su origen en una denuncia que el exmandatario presentó en 2012 contra Iván Cepeda por presunta manipulación de testigos. Sin embargo, en 2018, la Corte Suprema de Justicia archivó esa denuncia y abrió una investigación contra Uribe, al encontrar posibles indicios de que habría sido su equipo el que intentó incidir indebidamente en testimonios clave.
En el centro del caso están declaraciones de Juan Guillermo Monsalve y Pablo Hernán Sierra, exparamilitares que afirmaron que los hermanos Uribe Vélez habrían tenido vínculos con estructuras armadas ilegales en Antioquia.
A la espera del fallo
Con los alegatos finales ya presentados por ambas partes, se espera ahora el fallo de primera instancia en uno de los casos judiciales más emblemáticos de la historia política reciente de Colombia. El desenlace, sin duda, tendrá repercusiones no solo jurídicas, sino también en el panorama político, ya que el expresidente Uribe sigue siendo una figura central del debate nacional.