Redacción Extra
La comunidad denunció que durante una jornada social liderada por la Junta de Acción Comunal del barrio Ay Mi Llanura y la Corporación Convídame, jóvenes en proceso de resocialización fueron víctimas de una agresión violenta, al parecer, por parte de vecinos. La actividad consistía en embellecer el polideportivo del sector con pintura y algo de música, como parte de un trabajo voluntario orientado a la transformación personal de los participantes.
Los hechos
La victima señaló que, a pesar de que la música podría haber estado a un volumen alto, los jóvenes trabajaban dentro del polideportivo, alejados de las viviendas, “en ningún momento se trató de una fiesta, sino de una jornada de servicio comunitario”, señaló un participante de la jornada. Sin embargo, de acuerdo a testigos, estas personas irrumpieron en el lugar lanzando insultos y descalificaciones, tildando a los jóvenes de “bandidos” y exigiendo su retiro inmediato. La agresión escaló a la violencia física, dejando herido a un menor de edad y al presidente de la Junta de Acción Comunal.
Los hechos quedaron registrados en varios videos donde de acuerdo a los denunciantes “se evidencia el uso de lenguaje intimidante, amenazas y ataques físicos”, manifestó un testigo. Pese a los múltiples llamados a la calma, los agresores persistieron en su actitud violenta. Algunos de los jóvenes, al sentirse revictimizados, abandonaron su proceso de resocialización, truncando un camino que venían recorriendo con disciplina y compromiso a través de la Corporación Convídame.
Antecedentes
Según uno de los líderes de la jornada “no es la primera vez que se reportaban conflictos con los agresores, conocidos en el sector por sus constantes problemas con la comunidad”. Incluso, el presidente de la JAC, quien ha tenido varios altercados con ellos, ha sido descalificado en múltiples ocasiones por su condición de arrendatario, como si eso lo deslegitimara para liderar procesos sociales en su propio barrio.
Ante estos graves hechos, tanto la Junta de Acción Comunal como representantes del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) activaron las rutas legales para que los responsables enfrenten estos actos. Al mismo tiempo, las personas que lideraron la actividad trabajan para que los jóvenes puedan retomar su proceso de resocialización, “no es justo que, por culpa de la intolerancia, se les arrebate la oportunidad de construir una nueva vida”, puntualizó una ciudadana del sector.