El hallazgo de un extenso panfleto firmado por un presunto grupo al margen de la ley ha encendido las alarmas en la comunidad de la vereda Chachatoy, perteneciente al corregimiento de Morasurco, en la zona norte del municipio de Pasto.
El mensaje apareció pocos días después de que fueran hallados sin vida María Pejendino y Jaime Pineda, dos ciudadanos asesinados en circunstancias aún no esclarecidas, y cuya muerte estaría vinculada según el contenido del escrito a una presunta campaña de “limpieza social”.
Lenguaje
El documento, redactado con lenguaje intimidante, asegura que el grupo ejecuta una campaña de “limpieza y pacificación” contra personas vinculadas con hurtos y microtráfico. En él se señala que en la zona opera una supuesta “banda de apartamenteros y ladrones”, y que quienes pertenezcan a estas redes tienen ocho días para abandonar el corregimiento, o de lo contrario “fenecerán”, según la amenaza textual.
El panfleto también declara como objetivo militar a tres familias, señaladas de colaborar con actores delictivos. A su vez, se mencionan cinco personas por nombre propio, a quienes se acusa de actuar en complicidad con grupos delictivos en la zona. Estas amenazas han generado un profundo temor en la comunidad, especialmente entre quienes se sienten aludidos o quienes temen ser señalados falsamente.
Impone
Además de las amenazas, el panfleto impone un toque de queda desde las 6:00 p. m., con el argumento de que el grupo armado patrullará el territorio buscando presuntos delincuentes, ladrones y consumidores de sustancias psicoactivas. Esta medida no solo ha alterado la cotidianidad de los pobladores, sino que ha paralizado por completo las actividades comunitarias y sociales después de esa hora.
Habitantes del corregimiento han expresado su temor de salir de sus casas por miedo a represalias o equivocaciones. Aunque no se ha confirmado la presencia visible de hombres armados, el simple hallazgo del escrito ha sido suficiente para instalar el terror colectivo y el silencio forzado entre vecinos.