La investigación por el atentado perpetrado contra el senador y precandidato presidencial, Miguel Uribe, durante un evento politico en el parque El Golfito el pasado 7 de junio, avanza sin que se sepa todavía, ¿quién dio la orden?
Lo cierto es que ya hay tres presuntos implicados tras las rejas y un menor de edad internado.
Se trata del adolescente de 15 años, quien fue contratado para que le disparara a Miguel Uribe; Katherine Martínez, alias Gabriela o Andrea, quien fue la persona que entregó el arma de fuego tipo Glok de 9 milimetros, adquirida en Arizona, Estados Unidos y modificada para que disparara en rafaga; Carlos Eduardo Mora, el conductor del Chevrolet Spark gris que sirvió de “patrulla” en la logística del ataque y el más reciente detenido, fue Wilmar González alias El Hermano o El Viejo, quien ayudó a seleccionar al menor y a facilitar la fuga de los sicarios.
Todos ellos habrían sido contratados por millonarios pagos que les habría ofrecido, Elder José Arteaga, alias El Costeño, líder de la banda sicarial, que esta pendiente de ser capturado.
Aparecen nuevas pistas
Las personas que intervinieron en el entramado criminal contra el congresista Miguel Uribe, tendrían nexos con las disidencias de las Farc, de acuerdo con las nuevas pistas que le ha entregado a la fiscalía, alias Gabriela o Andrea.
La mujer le dijo a las autoridades que su cómplice, el costeño, la había enviado a la región del Caquetá con la promesa de que la “guerrilla” la iba a resguardar en la selva y le enseñarían sobre el manejo de drones y para ser francotiradora.
“El Costeño insistió en que me fuera para Florencia, que allá podía estudiar lo que yo quisiera. Le dije que qué se estudiaba o que qué podía estudiar. Me dijo que un curso de drones o un curso de francotirador, que estos cursos iban a ser allá con la guerrilla, pero no me mencionó qué grupo de guerrilla, si eran de las Farc o cuál era”, dijo Katerine Martínez.
Según su testimonio, Elder José Arteaga, le “dijo que él tenía contacto con la guerrilla, que no me iba a faltar nada, que esto era un campo en el monte, que así como había guerrilleros había mujeres, que no me asustara, que ya me había recomendado”.
Esta situación conformaría otra línea de investigación para determinar esos supuestos nexos de los atacantes con la disidencias que comanda o alias ‘Iván Mordisco’-que días pasados había salido a desligarse de los hechos- o las de alias ‘Calarca’.

