Nayla Carolina López Hernández fue diagnosticada con muerte cerebral
En la mañana del lunes 2 de junio se conoció una lamentable noticia relacionada con el accidente de avioneta ocurrido entre Chía y Cajicá el pasado 31 de mayo. Nayla Carolina López Hernández, auxiliar de enfermería de 29 años, fue declarada con muerte cerebral tras sufrir un trauma craneoencefálico severo. La joven, oriunda de Mapiripán, Meta, y madre de un pequeño niño, iba a bordo de la aeronave de Misión Médica que cubría la ruta Guaviare – Guaymaral.
En un comunicado oficial, la Clínica Universidad de La Sabana informó que la paciente ingresó a la unidad de cuidados intensivos con pronóstico neurológico reservado y, tras diversos estudios, fue declarada en muerte encefálica por el equipo médico.
La recordarán por siempre
Sus amistades y familia la describen como una mujer echada para adelante, muy inteligente, muy divertida, que le gustaba la recocha y alegraba la vida de todo su entorno. Fue una mujer sencilla, auténtica, buena amiga, hija, madre y pareja. Quienes la conocieron la recuerdan como alguien que dejaba huella con su sonrisa, su actitud positiva y su energía contagiosa. Siempre estaba dispuesta a ayudar, incluso en medio de las dificultades. Era la clase de persona que con un chiste levantaba el ánimo de todos y que, con su forma de ser, hacía más llevaderos los días duros. Sus familiares, colegas y allegados aseguran que su ausencia deja un profundo vacío, pero también un recuerdo imborrable. Para muchos, Nayla representaba la esperanza y la vocación de servicio, y por eso, su memoria será honrada por siempre.
Parte médico de los sobrevivientes
La Clínica Universidad de La Sabana también informó sobre el estado de salud de los otros cuatro ocupantes de la aeronave:
- Laurhin Alejandra Guaqueta, médica de 39 años: presenta traumas en cadera izquierda, manos y extremidades inferiores. Está en observación por trauma craneoencefálico leve.
- Carlos Alberto García Chica, piloto de 55 años: permanece en UCI, fue intervenido quirúrgicamente por múltiples fracturas y está bajo cuidado especializado.
- Hernilda Moreno Gómez, paciente de 59 años perteneciente a una comunidad indígena: sufrió traumas en tórax, abdomen y tejidos blandos. No ha requerido cirugía inmediata pero será evaluada por antecedentes oncológicos.
- Eduardo Marín Hernández, familiar de la paciente, de 31 años: permanece en urgencias con lesiones múltiples y bajo seguimiento neurológico por trauma leve.
El accidente continúa siendo investigado por las autoridades aeronáuticas.