Más de 70 funcionarios participaron en el segundo Taller Interinstitucional en Protección Internacional, Refugio y Apatridia, para fortalecer la capacidad institucional y atender a población migrante, refugiada y apátrida en Nariño.
Durante la jornada, se abordaron mecanismos legales para el reconocimiento de la condición de refugiado, atención a personas apátridas y aplicación de protocolos de protección internacional en contextos fronterizos.
Las entidades participantes coincidieron en la necesidad de adoptar un enfoque estratégico, articulado y humano frente al fenómeno migratorio, especialmente en territorios de frontera y donde se reporta gran cantidad de refugiados
Protocolos
Se acordó la construcción de un Plan de Acción Regional que incluya protocolos de atención y procesos de formación continua para los servidores públicos, así como el fortalecimiento de canales permanentes de articulación entre autoridades locales, la Cancillería, Migración Colombia y organizaciones humanitarias.
El funcionario, Leonardo González, del Ministerio de Relaciones Exteriores, explicó que el Sistema Nacional de Refugio es gratuito, no requiere intermediarios y se activa con la solicitud formal a través del canal oficial.
Javier Cabezas Castillo, asesor de Asuntos Binacionales de Nariño, señaló que en Ipiales residen más de 21.000 personas migrantes, en Pasto cerca de 16.000, y que el flujo migratorio mensual supera las 12.000 personas en tránsito, equivalentes a 140.000 al año.
Derechos
Por su parte, Olga Ríos, Coordinadora del GIT Refugio, destacó: “Tenemos 2.9 millones de ciudadanos venezolanos en el país, y nuestra meta es garantizarles acceso a derechos mediante rutas claras como el refugio, asilo y reconocimiento de apátrida”.
Las conclusiones de este taller reiteraron que la atención a la población migrante no puede ser improvisada, exige presencia efectiva del Estado, coordinación interinstitucional y rutas claras de respuesta para garantizar una atención integral y oportuna.
El evento fue liderado por el Ministerio de Relaciones Exteriores, a través del Grupo Interno de Trabajo de Determinación de la Condición de Refugiado (GIT Refugio), y contó con el respaldo de autoridades locales, Migración Colombia y otras entidades territoriales.

