El corregimiento de El Encano, zona rural de Pasto, con su majestuosa laguna de la Cocha, ha sido siempre uno de los grandes emblemas turísticos de nuestro departamento de Nariño, al lado del Santuario de Nuestra Señora de Las Lajas en Ipiales y las playas de Tumaco.
Sin embargo, este 2025 no ha sido precisamente propicio para este encantador paraje ni para sus moradores, quienes dependen su sustento de las actividades turísticas, como lo paseos en lancha en la laguna y su gastronomía, que tiene como plato fuerte la exquisita trucha, que hace las delicias de los visitantes.
Los problemas que hoy azotan a la población de El Encano, comenzaron en la tarde del viernes 7 de marzo, cuando-a consecuencia de la intensa temporada de lluvias-se produjeron varios deslizamientos, los cuales dejaron un trágico saldo de tres personas muertas y la destrucción de más de medio centenar de viviendas, por lo que de manera inmediata tuvieron que cesar todas las actividades turísticas de la zona.
Desde entonces, a pesar de los esfuerzos que se han hecho al respecto, por parte en primera instancia de la Alcaldía de Pasto, lo cierto es que El Encano todavía no alcanza su plena recuperación, lo que lógicamente preocupa, puesto que nos estamos refiriendo a un ícono turístico de Nariño, actividad de la que depende la mayoría de sus moradores.
De allí, que hoy debemos destacar el trabajo que, en ese sentido, viene realizando el Grupo de Protección al Turismo, que en una importante participación en el proyecto denominado la ‘Cápsula del Turismo’-oferta institucional-viene trabajando en estrecha colaboración con diversas entidades, con el objetivo de fortalecer la cadena de valor turística en el corregimiento de El Encano, al igual que en la ciudad de Pasto.
Nos referimos a un esfuerzo conjunto entre las autoridades de turismo del municipio, los dirigentes y líderes del corregimiento de El Encano, cuyos objetivos primordiales son los de impulsar el desarrollo regional, así como la preservación del patrimonio cultural y natural e igualmente, la implementación de prácticas sostenibles, que sean de amplio beneficio, tanto para los turistas, como para las comunidades locales.
En este orden de ideas, los propósitos fundamentales, en lo referente a la problemática de El Encano, son los de fomentar el turismo responsable, así como la integración de pequeños y medianos empresarios en lo concerniente a la oferta turística de la región, mediante un trabajo conjunto con instituciones locales y regionales es fundamental para la creación de un turismo, que cumpla con su más esencial objetivo que es el de ser rentable, pero a la vez esté en directriz con la identidad cultural y el medio ambiente.
De allí, la utilidad que se tiene para alcanzar esas metas, el que se compartan experiencias y estrategias para mejorar la calidad de los servicios turísticos, con la formalización de los prestadores de servicios y la realización de permanentes jornadas de capacitación, con lo que se logrará garantizar la mejor atención a los visitantes, lo que es la clave del turismo exitoso, inclusivo, accesible y sostenible.
En ese sentido, como lo expresa la líder Martha Arcos es esencial el fortalecimiento de la cadena de valor turística, para crear un modelo de desarrollo que beneficie a todos los protagonistas. Para ello, se requiere del decidido respaldo de las autoridades locales y representantes del sector privado para consolidar los compromisos que se requieren para sacar adelante el turismo que todos queremos y sobre el particular nos alegra saber que cada vez es mayor el número de emprendimientos en nuestra región, que tienen en la llamada “fabrica sin chimeneas”, la base y la esperanza, de alcanzar grandes éxitos.

