Ayer sábado se conoció la carta con la que Gustavo Bolívar presentó su renuncia irrevocable al cargo de director del Departamento Administrativo para la Prosperidad Social (DPS), anunciando que permanecerá en el cargo hasta el 16 de mayo.
En el documento, Bolívar agradeció al presidente Gustavo Petro por la oportunidad de haber dirigido una de las entidades más importantes del Gobierno nacional.
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Bolívar destacó que durante su gestión llegó junto a su equipo a zonas apartadas y excluidas del país, conociendo de cerca el funcionamiento del Estado.
«En los casi catorce meses que permanecí al frente de esta valiosa entidad, pudimos cumplir sus instrucciones de llegar a los rincones más recónditos», indicó.
Calificó su paso por el DPS como la experiencia más enriquecedora de su vida y ofreció su disposición para adelantar el empalme con su sucesor.
Llamado de atención
La renuncia se conoció tras un fuerte llamado de atención público del presidente Petro durante un evento en el Catatumbo, donde cuestionó la participación de Bolívar: «Rompo el orden del día porque no me parece que sea así. Los que renunciaron, renunciaron y no se puede onfundir eso».
Petro fue enfático al señalar que «si alguien renunció y tiene una aspiración, se va», en aparente referencia a las aspiraciones políticas que podría tener Bolívar de cara al futuro.