El telescopio espacial James Webb ha registrado un evento único en la historia de la astronomía: el momento en que una estrella devora un planeta de su sistema. Denominado ZTF SLRN-2020, este fenómeno ocurrió a unos 12.000 años luz de la Tierra, en nuestra galaxia, la Vía Láctea. Este hallazgo ofrece información valiosa sobre el destino de los sistemas planetarios en etapa de envejecimiento y, según los científicos, podría ser un adelanto de lo que ocurrirá en nuestro sistema solar en unos 5.000 millones de años.
La destrucción de un planeta: ¿cómo sucedió?
El evento se desató cuando la estrella, tras agotar el combustible en su núcleo, inició su transformación en una gigante roja. En esta fase, su atmósfera exterior se expandió hasta alcanzar la órbita del planeta, que tenía un tamaño similar al de Júpiter. Al estar demasiado cerca, la fricción atmosférica redujo su velocidad orbital, provocando que descendiera hasta ser completamente absorbido por la estrella. Este proceso liberó una gran cantidad de energía que incrementó el brillo de la estrella y su tamaño temporalmente.
Las observaciones iniciales fueron realizadas por la Instalación Transitoria de Zwicky (ZTF), pero fueron los instrumentos del telescopio James Webb, como el MIRI (Instrumento de Infrarrojo Medio) y el NIRSpec (Espectrógrafo de Infrarrojo Cercano), los que permitieron analizar el evento con mayor detalle. El aumento en el brillo infrarrojo previo al destello óptico indicó la formación de polvo debido al gas expulsado durante la destrucción.
¿Qué significa para la Tierra?
Aunque este fenómeno ocurrió a una distancia segura de 12.000 años luz, los científicos advierten que nuestro sistema solar podría experimentar algo similar en el futuro. Dentro de aproximadamente 5.000 millones de años, el Sol agotará su combustible y se transformará en una gigante roja. En esta etapa, es posible que engulla a Mercurio, Venus y, posiblemente, la Tierra. Este proceso marcaría el fin de nuestro planeta tal como lo conocemos y alteraría el equilibrio del sistema solar.
Reflexión hacia el cuidado del presente
Conocer más sobre estos procesos permite a la humanidad reflexionar sobre su responsabilidad hacia el planeta y la importancia de protegerlo mientras existimos. Este descubrimiento no solo mira hacia el futuro lejano, sino que también nos invita a cuidar de la Tierra en el presente. Las investigaciones como estas refuerzan la necesidad de que la humanidad tome medidas para valorar su hogar antes de que enfrente procesos cósmicos inevitables.