El 14 de abril es una fecha especial para el mundo del fútbol, ya que se celebra el Día Internacional del Portero, también conocido como el Día del Arquero. Aunque muchas personas creen que esta efeméride no existe, lo cierto es que se conmemora a nivel mundial como un homenaje a aquellos jugadores que defienden los tres postes con valentía y determinación.
Este día es un reconocimiento al esfuerzo y dedicación de los arqueros, quienes cumplen un rol clave dentro de cualquier equipo. Son los responsables de evitar los goles y, en muchas ocasiones, los héroes de partidos y campeonatos.
El legado de Miguel Calero
El Día Internacional del Portero se celebra en honor a Miguel Ángel Calero, arquero colombiano que dejó una huella imborrable en la historia del fútbol. Nació el 14 de abril de 1971 en Ginebra, Colombia, y construyó una destacada carrera que lo convirtió en una figura legendaria, sobre todo en México.
Calero defendió la camiseta de clubes como Sporting de Barranquilla, Deportivo Cali y Atlético Nacional, antes de dar el gran salto al Pachuca de México, donde se convirtió en ídolo. Durante su paso por el fútbol mexicano, ganó cuatro títulos de Liga MX, cuatro Ligas de Campeones de Concacaf y una Copa Sudamericana en 2006, el único trofeo de Conmebol obtenido por un equipo mexicano.
Además, tuvo una trayectoria destacada con la Selección Colombia, con la que disputó 72 partidos y participó en seis ediciones de la Copa América, logrando el título en 2001.
Una fecha que nació tras una tragedia
El Día Internacional del Portero fue instaurado en 2013, un año después de la muerte de Miguel Calero. En diciembre de 2012, el arquero sufrió una embolia cerebral que terminó con su vida en la Ciudad de México, dejando un gran vacío entre sus seguidores y el mundo del fútbol.
Fue la marca de guantes Rinat, patrocinadora de Calero, quien promovió la idea de establecer el 14 de abril, fecha de su nacimiento, como el Día del Arquero. Desde entonces, la celebración ha ganado relevancia y se ha extendido por Europa y América, convirtiéndose en una fecha especial para todos los que aman el fútbol.
Cada año, clubes, jugadores y aficionados recuerdan a Miguel Calero y destacan la importancia del portero en el juego. La frase que él expresó antes de su despedida sigue resonando en los corazones de los fanáticos: «Si volviera a nacer, me llamaría Miguel Calero. Y defendería, a huevo, los colores del Pachuca.»
El 14 de abril no es solo un día para recordar a una leyenda, sino también para celebrar a todos los guardametas que, con esfuerzo y dedicación, hacen del fútbol un deporte apasionante.