Pese a que el primer trimestre del año no ha sido favorable para el comercio y turismo religioso en el corregimiento de Las Lajas, comerciantes y fotógrafos aspiran que la temporada de Semana Santa se reactive en este sector del municipio de Ipiales.
Al respecto uno de los líderes del sector, Alberto Montenegro, manifestó que en esta ocasión se espera la presencia de unos 80 mil turistas que pueden impulsar la economía local.
“Hemos sufrido una crisis tremenda en los últimos meses, porque el tiempo y la naturaleza han causado problemas, unido a esto los bloqueos en el departamento del Cauca, afectando la economía al departamento de Nariño y por supuesto a la frontera”, dijo.
“Igualmente nuestra Panamericana, que se la inauguró recientemente, ya está sufriendo grandes deterioros, porque en el sector de Iles y El Contadero, está causando desbordamientos en la banca. Eso ha generado que menos peregrinos o turistas lleguen a su destino final”, explicó.
Visitantes
El dirigente manifestó que en esta época de turismo religioso la mayoría de visitantes vienen de la ciudad de Pasto, “pero estamos preocupados por el incremento de las lluvias en la región, ya que los visitantes por lo regular lo hacen a pie, entonces esperamos que se componga el tiempo, porque de lo contrario la gente no camina, no viene en la peregrinación., ya que nosotros relativamente vivimos solamente del turismo religioso que es el que más nos deja la utilidad para sobrevivir aquí en este corregimiento”.
Agregó que la visita de turistas del Ecuador ha bajado en los últimos años, ya que ellos buscan los grandes superficies comerciales para realizar sus compras, “a esto hay que añadir que este fin de semana las elecciones en este país coinciden con el Domingo de Ramos entonces hay un cierre de frontera y la gente de Pasto y de los alrededores solía venir con la intención de visitar el Santuario, pasar a Tulcán a hacer sus compras”, puntualizó.
Factores
El dirigente manifestó que ha sido múltiples los factores que ha incidido para que el comercio no sea como años anteriores, “pedimos a Dios que el dólar no siga subiendo porque la infracción de eso también da a entender que los precios se suben en la canasta familiar, estos dos meses han sido crueles ya que el encarecimiento de la vida y los cambios que han tenido los tiempos. Por ejemplo, la entrada a los colegios en febrero, eso da a entender que tienen que proveerse de uniformes, útiles escolares, pensiones y todo eso da, da criterio para que la gente no tenga sus recursos disponibles como para hacer turismo o religiosidad.