De acuerdo a lo señalado por The Sun, el corazón de Tessa Romero dejó de latir durante 24 minutos, siendo entonces cuando fue declarada clínicamente muerta. Sin embargo, los médicos lograron reanimarla, y al despertar, compartió un relato que ha capturado la atención de muchos: lo que vio y sintió en el más allá,
En ese tiempo, Romero describió haber sentido una calma que nunca había sentido. “Lo primero que sentí fue una paz inmensa, por primera vez en mucho tiempo, ya no había dolor físico ni emocional, el sufrimiento había terminado”, relató al medio británico.
Se vio a sí misma flotando sobre la habitación del hospital, observando su propio cuerpo mientras los médicos intentaban reanimarla. Aunque no podía interactuar con ellos, se sentía “viva, despierta y consciente”.
Finalmente, volvió a la vida y hoy no ve la muerte como un final, sino una transición.

