La llegada de Armando Benedetti al Ministerio del Interior genera un terremoto político, donde es evidente un rotundo rechazo a esa la decisión del Presidente de la República, Gustavo Petro, la cual es calificada como irrespetuosa, irresponsable e incoherente, lo cual tiene pensando al país, si el presidente es Petro o Benedetti.
El hecho de nombrar en un cargo tan importante a una persona que acaba de ser llamada a juicio por el caso de Fonade y, además, enfrenta seis investigaciones màs por enriquecimiento ilícito, cohecho y concierto para delinquir, nos resulta insólito a millones de colombianos y muestra a un presidente que sigue dando palos de ciego, en detrimento de un Gobierno que sigue avanzando hacia el abismo
Con este nombramiento, nos inquieta otro interrogante que ronda en el ambiente político desde el tristemente famoso consejo de ministros transmitido por televisión, donde se oficializó la designación del señor Benedetti como jefe de Despacho, anuncio que causó el primer gran remezón en los cimientos del Gobierno Nacional.
La pregunta, que hoy también se hacen millones de colombianos en todas las regiones del país, es, ¿Qué sabe, Armando Benedetti de Gustavo Petro?, para que el presidente haga caso omiso de congresistas, funcionarios y diferentes sectores de la opinión pública e insista en entregarle en bandeja de plata los mejores cargos. En ese sentido, se habla de un chantaje, lo que, conociendo los antecedentes de Benedetti, no sería nada raro, posible delito que, en el mencionado consejo de ministros, fue expuesto, sin mencionar nombres, aunque Benedetti estaba sentado en la misma mesa, por la vicepresidenta de la República, Francia Márquez.
Lo cierto es que el Gobierno del presidente Gustavo Petro, sigue de tumbo en tumbo, jugándose su prestigio por una persona que como Armando Benedetti, está seriamente cuestionada, por su comportamiento contra las mujeres, generó del que provienen las mayores críticas contra su nombramiento, sino también por graves líos jurídicos, los que harán que próximamente sea llamado a juicio.
Por lo pronto no cesan las grandes voces de rechazo a este nombramiento como las de la representante a la Cámara, Jennifer Pedraza, quien expresó que con estas acciones, el presidente de la República, Gustavo Petro, es el responsable de una dolorosa traición al mandato social del cambio, lo que se constituye en una escupida en la cara a la gente que confió en sus promesas de campaña.
Por lo tanto, cuando ya el presidente Gustavo Petro, tiene el sol a sus espaldas, vuelve a enfrentar una de las crisis más duras de su Gobierno, ante los continuos rechazos de los colombianos a sus decisiones. En este caso, el mandatario nacional se la vuelve a jugar con Armando Benedetti, quien lo ha dejado mal parado en los cargos que le ha encomendado hasta el momento. Se trata de unos antecedentes que nos preocupan bastante, ya que aquí cabe otro interrogante. ¿Qué pasaría si en el juicio que se le avecina el flamante Ministro del Interior es hallado culpable y enviado a la cárcel? No nos cabe la menor duda que esto sería otro duro golpe para una administración, que como están las cosas, se irá quedando en deuda con millones de colombianos.
Seguramente, el presidente Gustavo Petro, premió la lealtad, de quien la verdad sea dicha, fue protagonista de su elección, pero desafortunadamente no tuvo en cuenta la trasparencia y esto es bastante grave, en un Gobierno que había anunciado una lucha sin cuartel contra la corrupción.