DON PEDRO BOMBO se pasó por la calle 17 para ir a rezar al templo de San Agustín, pero cuando llegó ya había terminado la santa eucaristía y cerrada la puerta, por lo que decidió irse a descasar en unas bancas que las observó junto al CAI. En ese momento se encontró a un amigo de su época y lo invitó a sentarse a unas bancas para contarle algunos chismes. Sucede que las bancas están totalmente dañadas no sirven para descansar porque se han llevado las tablas.
“DON PEDRITO, estas bancas llevan varios años aquí y ninguna autoridad les hace mantenimiento, y esto da mal imagen a los turistas y persona que llegan de otros municipios. Deberían hacer la reposición porque están en pleno centro de la ciudad”.

