Los recientes acontecimientos que se han registrado en los últimos días en la vía Panamericana que une los departamentos de Nariño y Cauca, nos tienen al borde de un ataque de nervios, ya que quienes se atreven a viajar se ven abocados a una verdadera pesadilla.
No es para menos, ante lo que estamos viendo: una vía que se ha convertido en un verdadero peligro para los viajeros, quienes están siendo interceptados en la carretera para ser despojados de sus pertenencias.
Nos estamos refiriendo a una situación que está pasando de castaño a oscuro. Es así, como en las últimas horas vimos como en zona del municipio caucano de Piendamo, personas que se identificaron como integrantes de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional Eln, salieron armados a la vía y detuvieron a los vehículos, para apoderarse de dinero y elementos de valor.
No queremos en estos momentos entrar a cuestionar si estos piratas de tierra, eran en efecto de la guerrilla o, eran delincuentes comunes. Lo cierto es que les causaron a los viajeros enormes perjuicios económicos, como ocurrió con un transportador al que le quitaron 700 mil pesos que le habían pagado como anticipo para llevar una carga.
Nos parece gravísima la situación de inseguridad que atraviesa hoy la vía Panamericana, puesto que además de los robos, tenemos que ya se han presentado varios casos de homicidio, como el que se presentó hace algunos días en el municipio de El Patía, donde en extrañas circunstancias fue asesinado un joven a, quien las autoridades señalaron como perteneciente a la guerrilla del Eln, en tanto que su patrón y familias, manifestaron que esta persona no tenía nada que ver con grupos alzados en armas.
Lo que nos indican todos estos amargos episodios, es que lamentablemente la vía Panamericana, entre Pasto y Popayán, se ha convertido en una tierra de nadie, en detrimento de miles de viajeros que día a día necesitan viajar.
Naturalmente, no es la primera vez que este importante tramo vial es escenario de estos hechos de violencia, robos, agresiones e inclusive asesinatos. En ese sentido, recordamos como hace algunos años, la presencia de bandas de atracadores en la carretera, fue tan grande, que las empresas de transporte se vieron obligadas a suspender la salida de buses en las rutas Pasto-Popayán-Cali y viceversa, puesto que la situación llegó a tener características tan graves, que los atracos de los grupos de delincuentes no solo ocurrían durante la noche, sino también a plena luz del día.
Ahora lo preocupante de los hechos que se vienen registrando en la vía Panamericana, es que no se puede asegurar que sean delincuentes comunes los que estén haciendo de la suya y en ese sentido nos parece que gran parte de esta violencia que se está viviendo en este tramo, que es uno de los más importante de Colombia, está directamente relacionado con la delicada situación de orden público que se vive en el departamento del Cauca.
De allí, el llamado que hacemos para que las autoridades recuperen la vía Panamericana. Ante los alarmantes hechos que ya son cosa de todos los días y noches, es necesario que haya presencia de la Fuerza Pública, ya que la triste realidad es los viajeros están siendo asediados no solo por los ladrones de oficio, sino también por los integrantes de los grupos alzados en armas, que hacen presencia en vastas zonas del departamento del Cauca. No es posible que una arteria vial de tanta importancia se encuentre en estos momentos en poder de los violentos.

