Una joven indígena de Tumaco falleció tras consumir herbicida

En una tragedia que ha consternado a la comunidad indígena del Resguardo El Gran Rosario, ubicado en el corregimiento de La Guayacana, en la zona rural de Tumaco, Nariño, una joven de 19 años de edad identificada como Yisela García Guanga falleció el pasado viernes tras ingerir un químico herbicida en circunstancias aún desconocidas. La joven fue trasladada de urgencia al Hospital San Andrés, pero a pesar de los esfuerzos médicos, no pudo sobrevivir a la alta dosis de intoxicación que presentaba.

El lamentable suceso ocurrió cerca de las 8:00 p.m. del viernes, cuando familiares de Yisela la encontraron en una grave condición de salud, aparentemente después de haber ingerido la sustancia. Ante la gravedad de la situación, decidieron trasladarla inmediatamente al hospital de Tumaco, donde fue atendida por el personal médico. A pesar de las intervenciones realizadas, la joven sufrió un daño irreversible a causa de la intoxicación, y lamentablemente falleció alrededor de las 11:00 p.m., tres horas después de su llegada a la institución de salud.

Suicidio

El caso ha generado profunda preocupación en la comunidad de El Gran Rosario, que aún se encuentra en shock ante la trágica pérdida de una joven conocida y querida en la zona. Hasta el momento, las autoridades no han podido esclarecer las razones detrás de esta tragedia. Aunque la hipótesis más probable es que se trate de un suicidio, aún no se descarta ninguna otra posibilidad, por lo que la investigación continúa abierta.

Yisela García Guanga era una joven indígena que formaba parte del Resguardo El Gran Rosario, una comunidad ubicada en el kilómetro 68 de la vía Tumaco – Pasto. La región es conocida por su aislamiento y por ser un territorio en el que la comunidad indígena lucha constantemente por preservar sus tradiciones y su modo de vida, en medio de diversas dificultades sociales y económicas. Pese a la falta de información precisa sobre las causas de su decisión, la familia de Yisela y sus seres queridos se encuentran desconcertados, ya que no se había reportado previamente ningún signo de angustia o problemas emocionales graves que pudieran haber motivado tan drástica acción. Las autoridades locales han solicitado la colaboración de la comunidad para recolectar más información que permita entender mejor los hechos que llevaron a la joven a ingerir el herbicida